En las oficinas de Neukölln, donde el gran oso de Berlín adorna la pared y la bandera azul y blanca ondea con orgullo, la noticia de la muerte de Kay Bernstein ha sumido al Hertha en un profundo pesar. A los 43 años, el presidente que alguna vez lideró cánticos desde la curva y llevó la pasión de las gradas a la presidencia, falleció el martes 16 de enero, según informó el club alemán.
Hertha BSC trauert um Kay Bernstein. Am heutigen Dienstag hat Hertha BSC die furchtbare Nachricht erhalten, dass Präsident Kay Bernstein im Alter von 43 Jahren unerwartet verstorben ist. Der gesamte Verein, seine Gremien und Mitarbeitenden sind fassungslos und zutiefst bestürzt. pic.twitter.com/XAAnniUEEn
— Hertha BSC (@HerthaBSC) January 16, 2024
La sala de reuniones del Olympiastadion, donde una vez resonaron los cánticos vibrantes de los hinchas, ahora se encuentra envuelta en un silencio pesaroso. Bernstein, conocido por su conexión única con el club, deja un vacío imposible de llenar. Su historia con el Hertha no solo fue de triunfos y desafíos deportivos, sino también de un compromiso inquebrantable que lo llevó desde la curva de animación hasta la silla presidencial del estadio.
Kay Bernstein, el corazón de Berlín
Nacido en Marienberg en 1980, Bernstein llegó a Berlín con su familia en 1992. Desde sus primeros días en el Olympiastadion en 1994, su corazón quedó cautivado por el Hertha. La curva de animación se convirtió en su hogar, tras unirse al grupo ultra Harlequins ’98 y destacar como uno de los miembros más apasionados. Su historia en las gradas, marcada por tres expulsiones del estadio y una retención por parte de la policía, refleja el fervor y la intensidad que llevó al Hertha a la presidencia.
Como hincha activo, organizador a nivel nacional y trabajador incansable por la curva durante ocho años, Bernstein canalizó su devoción en una exitosa carrera empresarial con compañías de comunicaciones y construcción. En verano de 2023, asumió la presidencia del Hertha, liderando al club en tiempos de desafíos en la segunda Bundesliga.
La noticia de su fallecimiento ha dejado consternado al club y a la comunidad futbolística. El comunicado del Hertha expresa: «Todo el club, sus organismos y sus trabajadores, estamos consternados. Toda la familia del Hertha está de duelo y acompañando a los deudos de Kay en esos momentos difíciles«.
La partida de Bernstein no solo deja un vacío en la presidencia del Hertha, sino también en el corazón de los hinchas que compartían su pasión y se veían alentados por ella. Desde la fundación de la barra Harlekins Berlín en 1998 hasta las prohibiciones temporales de acceso al estadio, Bernstein fue un símbolo de la ferviente lealtad que los hinchas del Hertha demuestran partido a partido.
Mientras el Hertha llora la pérdida de su presidente, la huella de Bernstein perdurará en el Olympiastadion y en aquellos que, al igual que él, llevan el azul y blanco del Hertha en lo más profundo de su corazón.