Fue a última (ultimísima) hora, pero se dio. Raheem Sterling consiguió salir del Chelsea para tratar de cambiar el rumbo de su carrera. Para ayudarle, Mikel Arteta le ha tendido la mano. Su Arsenal necesitaba un extremo izquierdo, y no podía pasar por alto a aquel futbolista con el que trabajó en su etapa como segundo entrenador del Manchester City. En aquellos años, Sterling era uno de los mejores en su posición. Y, por mucho que quede lejos aquella versión, aún está a tiempo de recuperarle para la causa. Mientras que Arteta se juega la Premier, el inglés se juega su futuro. Si falla, no tendrá más oportunidades.
La Premier League sigue rompiendo el mercado, mientras que la liga se rasca el bolsillo
💭 ¿Es un buen fichaje paea el Arsenal?
El Arsenal de Arteta se encuentra en una fase crucial de su proyecto. Después de dos temporadas luchando por destronar al Manchester City, los gunners han apostado por fichar futbolistas que cerrasen un equipo titular tremendo. Por eso llegaron Calafiori y Merino, y por eso ha sorprendido el fichaje de Sterling. El inglés es un futbolista denostado, que se asocia más al error cómico en redes que a lo que fue hace casi un lustro. Vale que refuerza la posición más débil del Arsenal, ¿pero merece la pena el riesgo?
Sterling, a sus 29 años, es un jugador que ha experimentado los más altos picos de rendimiento, habiendo ganado múltiples títulos de la Premier League y siendo un pilar fundamental en la selección inglesa durante años. Arteta está convencido de que ese futbolista sigue ahí, y lo que se ha visto en el Chelsea es fruto de la inestabilidad del club. Él le ha divisado en sus buenos años, por lo que sabe lo que puede conseguir. De ahí el interés por ficharle: si le recupera para la causa, tendrá el equipo titular con el que sueña.
El Arsenal empezó con Mikel Arteta y culminará con Mikel Merino
El trato, por esa parte, es perfecto. Es una cesión por un año y sin opción de compra, por lo que el Arsenal no se pilla los dedos en caso de que salga mal; y Sterling tiene la sensación de que es su única bala, por lo que se va a esforzar más. No va a tener más oportunidades así para recuperar su estatus. Una buena temporada le devolvería al Chelsea con la sartén por el mango para regresar al mismo Arsenal o buscar una nueva aventura acorde a la calidad que se le presupone. Y, claro, para los blues tampoco está mal. Se han quitado del medio a un jugador que no contaba para Maresca, y tienen la posibilidad de sacar dinero por él en el futuro. Todos han ganado, como mínimo, la esperanza de un futuro mejor que su presente.
🥅 Sterling, con red de seguridad ante el vacío
Dejando de lado el análisis cortoplacista del fichaje, es evidente que la unión de Sterling y Arteta es ilusionante. Desde sus mejores temporadas con Guardiola, el extremo nunca había tenido una figura en el banquillo que confiase tanto en él. Por lo que sí, Sterling está mirando al vacío, pero lo hace con una red de seguridad de por medio. Sabe que su último tren es, probablemente, uno de los mejores que ha cogido en su carrera. Solo el del Manchester City fue mejor.
Y es que es incuestionable que Arteta tiene mano para revitalizar carreras. Hay mil y un ejemplos, por lo que no hace falta buscar demasiado. Por ejemplo, Granit Xhaka estaba desahuciado cuando llegó al Arsenal, y, junto a su amigo Xabi Alonso, le transformó en uno de los mejores directores de orquesta del fútbol europeo. También podríamos meter en esta lista a Martin Odegaard, al que le hizo alcanzar el potencial que se le presuponía en su adolescencia y que parecía haber perdido en su juventud con el Real Madrid. Si consigue algo parecido con Sterling, será otro caso de éxito más.
Sterling está ante su última oportunidad de permanecer en la élite del fútbol inglés.
¿Cómo es capaz de acumular tantos ejemplos? Pues, principalmente, por como trabaja el aspecto mental. Y este, claro está, es el que necesita mejorar el inglés. Sterling siempre ha estado en el punto de mira mediático, y su bajón de rendimiento no ha ayudado. Necesita recuperar la confianza que tenía antaño, cuando respondía con oídos sordos a las críticas y se dedicaba a trabajar en su fútbol. Con Arteta tendrá el oasis que necesita para subsistir y volver a ser el de antaño.
A fin de cuentas, todo dependerá de como funciona el tándem que formarán Sterling y Arteta. Uno debe adaptarse al sistema del otro, y ambos deben conseguir entenderse por los beneficios que se pueden aportar. Porque mientras a uno le falta la Premier, el otro necesita un golpe de efecto en su carrera. Si todo sale bien, podríamos estar ante una de las historias de redención más especiales del fútbol reciente. Sería el complemento perfecto a la que debe ser la temporada más importante del proyecto de Arteta en el norte de Londres.
