«Llegué siendo un niño de seis años con la ilusión de llegar muy lejos en este club y me voy con 17 con cierta decepción por no ver cumplido aquí ese sueño», puso en su Instagram, y es difícil decir más con menos. Este extracto corresponde a la carta de Paulo Iago al madridismo tras abandonar Valdebebas y recalar en el Sporting de Portugal. El que estaba llamado a ser el próximo gran talento de ‘La Fábrica’ se va por la puerta de atrás. Su paralelismo con Lamine Yamal, futbolista con el que comparte generación y potencial, se ha quedado en nada. ¿Qué ha pasado para que el Real Madrid pierda a su joya?
❌ Paulo Iago no pudo con Arbeloa en el Real Madrid
La carrera de Paulo Iago en la cantera del Real Madrid fue meteórica. A base de goles, el joven lucense se convirtió en uno de esos prospectos por los que suspira media Europa. Era uno de esos canteranos con hype, de los que se hablaba como un Mesías. Además, con Lamine Yamal al otro lado del puente aéreo, la historia estaba escrita. Ellos dos serían los referentes de Real Madrid y Barça, los que protagonizarían las grandes batallas del futuro. La irrupción del culé en el primer equipo fue el primer atisbo de esa rivalidad en ciernes. Hasta Nike, la marca que vestía al de Mataró y que aún patrocina a Paulo Iago, se hizo eco de ello, con anuncios en los que salían ambos.
Paulo Iago et Lamine Yamal en partenariat avec Nike.
2 grands espoirs du football espagnol : l’un jouant au Real, l’autre au Barça. pic.twitter.com/aWYsxNdyxY— Espacio Masía (@Espacio_Masia) June 22, 2023
El problema estuvo en la temporada pasada. Mientras que Lamine ya era una estrella del primer equipo, el del Real Madrid seguía en el Juvenil A con Álvaro Arbeloa. Pese a que el club le prometió darle confianza en su salto al fútbol profesional, él no lo veía claro. Tenía un rol secundario con el exjugador salmantino, lo que empezó a afectar a la relación con su entrenador. Lo de Paulo Iago con Arbeloa comenzó a ser personal. A sabiendas de que iba a continuar un año más en el Juvenil A y que su contraparte culé ya brillaba en la élite, no quiso esperar más. Le entró prisa por alcanzar a Lamine Yamal. Habló con el Real Madrid para arreglar su contrato y tener la carta de libertad. Paulo Iago estaba libre.
🇵🇹 El Sporting de Portugal, ¿un buen destino?
Después de que media Europa se interesase por él, el joven futbolista ha decidido no moverse de la Península Ibérica. El Sporting de Portugal ha conseguido convencerle para que se mude a Lisboa. En principio, será jugador del segundo equipo, pero se prevé que tenga minutos con los mayores. No podía ser de otra manera en un club que apuesta tanto por su cantera. De ahí salieron Luís Figo y Cristiano Ronaldo, nada menos. Paulo Iago ha apostado por una institución con un modelo diametralmente opuesto al del Real Madrid con su cantera. Porque mientras que en la capital de España lo ven como una fuente de ingresos incluso antes de que lleguen al primer equipo, en la de Portugal prefieren acompañarles en sus primeros pasos en el profesionalismo.
Paulo Iago estaba llamado a jugar en el primer equipo del Real Madrid, pero se quedó por el camino.
Por ello, a orillas del río Tajo, Paulo Iago se va a encontrar un entorno idóneo para crecer. La liga portuguesa no es una liga tan competitiva como la española, y estará en uno de los mejores conjuntos del país. Vamos, que sin tener la exigencia que hay en el Real Madrid, también se le mirará con lupa. Lo bueno es que, si la rompe, está en una competición propicia para conseguir un gran traspaso. Ya sea por su facilidad para hacer números o para alimentar la fiereza en las negociaciones de los conjuntos portugueses, puede conseguir pegar ese salto futbolístico y mediático que tanto busca en su pugna con Lamine Yamal.
Lo malo de todo esto es el mensaje que manda al resto de canteranos merengues. Si el que estaba llamado a ser una estrella no llega, ¿quién va a hacerlo? La comparación es aún más sangrante si se hace contra el Barça. En esa batalla se perdió Paulo Iago, precisamente. Sin embargo, no es algo que se desconozca dentro de las inferiores del Real Madrid. Llegan muy pocos, pero, los que llegan, lo hacen para quedarse. Quizás, Paulo Iago no era para tanto o no era su momento, y por eso tomaron la decisión de frenar su meteórica progresión. Del joven jugador del Sporting de Lisboa dependerá el darles o no la razón.
