Raúl González y el Real Madrid anunciaron la pasada semana el final de su etapa como entrenador del Castilla. Después de siete temporadas en el banquillo del filial blanco, el que fuera uno de los máximos referentes del club ha decidido poner punto y final a su andadura en la entidad madridista.
La noticia coincide con la llegada de Xabi Alonso para dirigir a los del Santiago Bernabéu, un puesto al que también aspiraba Raúl y que ahora se le aleja por lo menos en el corto plazo. Pero, ¿qué es lo que motivo al Real Madrid a desprenderse del que fuera mítico jugador madridista?
Raúl, el ídolo que no terminó de tener recompensa al frente del Real Madrid
Con todo, y sobre todo con la llegada del técnico tolosarra al banquillo del primer equipo, el Real Madrid buscará levantar el Mundial de Clubes que se celebrará en Estados Unidos el próximo mes de junio.
Durante su etapa en el Castilla, Raúl ha destacado por su compromiso con la formación de los futbolistas más jóvenes, así como por potenciar el talento y por intentar implementar una idea de juego propia pero que fuese de la mano con los valores y principios de los de la casa blanca.
No obstante, lo cierto es que los resultados no han sido los esperados. Esta temporada, que parecía ser la de la consagración para ascender a Segunda división, ha sido cuanto menos irregular. Tras encadenar varias rachas de resultados negativos, el combinado blanco ha finalizado el curso fuera de los puestos de playoff con 54 puntos, con 12 victorias, 18 empates y ocho derrotas en 38 partidos.
“Xabi Alonso ha hecho lo que Raúl no quiso hacer”
Por lo que, si bien para Raúl también era la oportunidad de demostrar que estaba preparado para dirigir el primer equipo, la llegada de Xabi Alonso ha cambiado por completo los planes del técnico madrileño. Todo eso ha hecho porque la entidad madridista haya optado por mostrarle la puerta de salida al que ha sido el gran ídolo merengue, primero como jugador y después dando sus primeros pasos como entrenador.
Sobre su salida habló Antón Meana en la Cadena SER, el cual rescató una conversación que tuvieron la primera línea de la directiva del equipo del Santiago Bernabéu sobre su mítico ‘7’: “Xabi Alonso ha hecho lo que Raúl González no quiso hacer”, empezó diciendo.
“El Madrid siempre le dijo a Xabi Alonso que, si quería entrenar al primer equipo, se tenía que hacer una carrera fuera“, explica Meana. El exjugador comenzó su carrera en los vestuarios con el equipo infantil A del Real Madrid, pero, ante esta advertencia, entendió que su futuro debía estar lejos de la capital de España. Primero se fue a entrenar al filial de la Real Sociedad, a quien Xabi Alonso logró llevar a Segunda división en 2021. Y luego se marchó al Bayer Leverkusen, donde se ganó los anhelos de muchos equipos europeos, el primero el del Real Madrid.
Raúl decidió llegar al primer equipo desde el filial, el camino más difícil
“Triunfó en Alemania”, ganando tres títulos con el Bayer Leverkusen en tres temporadas, “y ha sido un clamor del madridismo y del fútbol europeo para que fuera el sucesor de Ancelotti”, descifró.
En la contraparte, Raúl González, el gran futurible para el banquillo blanco antes de que Xabi Alonso triunfara en Alemania, “decidió hacer el camino más difícil”. Meana explica que este camino fue “llegar al primer equipo desde el filial, a pesar de que le decían que había que hacer la ‘mili’ fuera”. En este sentido, Manu Carreño explica que, para él, “al banquillo del Real Madrid tienes que venir con la mili hecha” y que, de lo contrario “es muy difícil”.
Falta de sintonía con la dirección del club por el funcionamiento de la cantera
Su aspiración de ser algún día el entrenador del Real Madrid se mantiene, sin embargo, de momento todas las puertas se le han cerrado. “Estoy seguro de que estos años me han hecho crecer como profesional y persona. Se abre una nueva etapa con el convencimiento de que algún día volveré a mi casa”, escribió Raúl en su adiós.
Agradeció al club por la oportunidad y a todos los empleados, pero no citó expresamente al presidente, Florentino Pérez. Todas las voces apuntan a una falta de sintonía entre él y la dirección del club, una brecha que viene de lejos.
Especialmente por algunos aspectos del funcionamiento de la cantera, y la llegada a puestos, algunos de responsabilidad, de personas que no considera preparadas. En paralelo, su relación con Carlo Ancelotti siempre resultó fluida y él fue uno de los valedores de Raúl Asencio en su sorprendente ascenso al primer equipo.