El inicio del mes de julio no es solo el comienzo de la temporada vacacional para algunos, sino que también es el inicio no oficial de un nuevo curso del fútbol. Sobre todo con la apertura del mercado de fichajes. Muchos futbolistas finalizan sus contratos y otros se plantean nuevos horizontes. En definitiva, es época de cambios. Y no solo en las confecciones de las plantillas, sino también en las reglas que se vinculan al fútbol. En este contexto, la International Football Association Board (IFAB) introduce cambios en las reglas del juego, siempre con la misión de hacer del fútbol un deporte más llamativo para los aficionados y también para los que participan de él.
👉 ¿Qué reglas ha modificado la IFAB para el curso que viene?
Lo que más preocupa al organismo encargado de definir las reglas del fútbol a nivel mundial y sus futuras modificaciones son las pérdidas de tiempo que ralentizan el juego y hacen que los partidos sean más aburridos. Aunque otros años han incidido en este tema con variaciones más drásticas, todavía se busca mejorar este aspecto. Por eso se han introducido ciertas modificaciones, eso sí, que no tienen ninguna incidencia con la durabilidad de los partidos. Estos han sido los cambios más importantes y que entrarán en juego para los partidos de la temporada 2024/2025:
.- Se incluye la información directa por auricular al árbitro cuando se trate de un partido con tecnología DAG (detección automática de goles). Aunque lo normal es que el colegiado tenga esa información a través del reloj homologado o tras revisar las imágenes.
.- Se permitirá la realización de un sexto cambio siempre y cuando el jugador que abandone el terreno de juego lo haga por una conmoción cerebral. En ese caso, el equipo no saldrá perjudicado y se protegerá la salud del jugador.
.- En cuanto a equipaciones, cada jugador deberá ser responsable del tamaño de sus espinilleras, mientras que los porteros podrán utilizar pantalones largos, sin ser obligatorios. También se ha acordado que el brazalete de capitán será de un solo color y que también puede incorporar la palabra «capitán», o bien la letra «C» o una traducción a otro idioma, que también será de un único color.
.- No toda mano que evite una ocasión clara será roja; se sancionará con penalti y tarjeta amarilla. Y también las no intencionadas para pitar penal que cortan ataque prometedor se quedarán solo en penalti y sin amonestación.
.- El balón deberá estar centrado en el punto de penalti antes de lanzarlo o al menos la mayor parte de él tendrá que estar en ese centro. No se permitirá que la pelota esté desplazada hacia un lado. En cuanto a los penaltis, solo se repetirán si el jugador que invade el área o el portero que está sin el pie en la línea en el momento del lanzamiento influye en el resultado final de la jugada.
La IFAB también ha puesto en marcha nuevos ensayos que pueden ser aprobados próximamente y que ya se están utilizando en algunas de las competiciones. Habrá penalizaciones para las protestas que no sean exclusivamente de capitanes. Es algo que se está llevando a cabo en esta Eurocopa. En este sentido, el árbitro tendrá el poder para decretar una pausa de calma. Estas pausas se concentrarán en los capitanes y entrenadores con la responsabilidad de lograr que los compañeros y los miembros del cuerpo técnico se comporten debidamente. Y para acabar, se alarga de seis a ocho segundos el tiempo que los porteros pueden retener el balón. Si se sobrepasa ese tiempo se castigará con un córner para el rival o un saque de banda a la altura del punto penalti.
😬 A vueltas con la ‘Ley Wenger’
Una de las propuestas más debatidas es la llamada ‘Ley Wenger’, que permitiría que un delantero esté por delante del defensa siempre que una parte de su cuerpo esté en línea con el defensor. Aunque esta norma aún está en fase de estudio, su implementación podría revolucionar el juego. El reciente gol anulado a Dinamarca contra Alemania por centímetros en la Eurocopa ha reavivado la discusión, y son muchas las voces que claman por su adopción. En cambio, hay otros que consideran que el atacante sacaría mucha ventaja al defensor en estas acciones y que revolucionaría en exceso el juego.
Lo que sí se pretende es que los partidos sean más fluidos y no se lleguen a situaciones extremas de tener que alargar un encuentro más allá de los 100 minutos por pérdidas de tiempo. Desde la IFAB se busca minimizar los gestos antideportivos de los futbolistas para sacar ventaja. Con estas medidas se espera no solo mantener la esencia del fútbol, sino también garantizar que cada minuto en el campo sea una verdadera fiesta para los aficionados. En un deporte donde cada segundo puede marcar la diferencia, optimizar el tiempo de juego y reducir las interrupciones se convierte en una misión crucial.