Pese a su prematuro debut hace cuatro campañas en el Valencia CF, cuando apenas tenía 18 años, y de empezar a contar para Paulo Bento desde 2019, el asentamiento de Kang-in Lee en la Liga Santander ha llegado esta 2022/2023. A sus 21 años y bajo el estilo pragmático del RCD Mallorca dirigido por Javier Aguirre, el mediapunta surcoreano ha explotado como segunda punta, junto a un ‘9’ de envergadura y brega como Muriqi. Artífice en los éxitos del conjunto insular y protagonista también en aquellos momentos de zozobra. Algo que, desde un rol de suplente, o revulsivo, mejor dicho, trasladó a Corea del Sur en el Mundial.
🤔 La clase, en planes rudimentarios, puede funcionar
Muchas veces culpamos al ecosistema cuando los mediapuntas talentosos no funcionan como se espera. João Félix es el caso más recurrente en la actualidad. Sin embargo, el jugador asiático y entrenador mexicano, se han propuesto derribar este mito. Que suele ser así, pero que no siempre tiene por qué ser así. La cintura de Kang-in Lee es una de las claves de su éxito, en sentido literal y metafórico. Porque su agilidad es diferencial para zafarse de marcajes o para girar si recibe entre líneas, pero también porque se ha sabido adaptar a las necesidades del colectivo.
Zurdo, aunque con buen manejo de la diestra, habitual cambio de pie para regatear, pelota cosida en conducción y un punto de agresividad en la toma de decisiones. No se conforma con jugar fácil. Y eso, el RCD Mallorca, donde no sobra un gramo de creatividad, lo agradece. Es escurridizo por físico, técnica, imaginación y por esconder sus intenciones antes de ejecutar la acción.
Lo que él demanda, a cambio, es cierta libertad posicional. Y, como de bien nacido es ser agradecido, aprovecha su facilidad para producir cifras con su disparo o centro con efecto desde la frontal. Su golpeo también marca diferencias en un escenario de repliegue en bloque medio o bajo y transición. Más cualitativo que cuantitativo. Y eficiente en el balón parado. Un punto de mejora reside en dar algún toque menos por intervención, aunque esto también puede ser útil si atrae muchas miradas que contribuyan a liberar a sus compañeros.
🐛 Piernas de seda, mente de cristal
La principal incógnita de su fútbol siempre ha estado en la inconsistencia mental. Aunque, si se siente importante y eso coincide con sus tramos lúcidos, como es el caso, es un mediapunta que cambia partidos. O que los comanda, para que no se necesite transformarlos. Pero es un paso relevante el comprobar que, en los pocos días donde ha sido recurso y no discurso para Aguirre, y en los muchos donde Bento le ha relegado a un papel de segundas partes, él se ha revelado ante la situación, en lugar de asumir la adversidad con displicencia. Un claro indicativo de que su mentalidad, o la parte de ella que exterioriza, ha cambiado.
🚴🏻♂️ No sacar la cadena de la bici
Seguramente, lo ideal para Kang-in Lee sea terminar, al menos, la temporada en Mallorca. Sin prisa y con confianza. En una situación clasificatoria que se antoja relativamente cómoda para los objetivos marcados. Después, la tentación de otras ligas estará presente, pero debe ser muy cauteloso y elegir bien su próximo destino. Mantener la inercia de su crecimiento y desechar aquellas decisiones que puedan poner en jaque su proyección.
Porque la base de su talento siempre estuvo ahí, pero la consistencia puede desaparecer paulatinamente si cae en un contexto donde no tenga galones o donde se le limiten más sus minutos. La Premier League, por tanto, no parece una opción mejor en términos generales que la liga española, la Serie A o, incluso, que una Bundesliga con mucho jugador asiático y fútbol dinámico. La ventaja que tiene es que ya ha demostrado ser válido para escenarios verticales, de transiciones, o para uno más posicional.