El Real Betis Balompié estaba huérfano. La recaída de Isco Alarcón y la salida de Nabil Fekir dejaron al Benito Villamarín sin un mago. Entonces, pensando en que todo tiempo pasado fue mejor, encontraron la solución: ¿y si volvían a llamar a la puerta de Giovanni Lo Celso? El argentino regresó, y en tiempo récord ha conseguido que los verdiblancos recuperen la sonrisa. Porque podrían tener más o menos puntos de los que marca la tabla, pero es evidente que, con el rosarino, el futuro vuelve a ser esperanzador.
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🤝 Lo Celso, un viejo conocido
Para los aficionados del Betis, el nombre de Giovanni Lo Celso trae recuerdos de una etapa brillante. El mediocampista argentino ya vistió la camiseta verdiblanca durante la temporada 2018-2019, dejando una huella imborrable en el club y en la afición. Su capacidad para asociarse, su visión de juego, su capacidad para llegar al área rival y su habilidad para marcar goles lo convirtieron en uno de los futbolistas más destacados de aquel histórico Betis dirigido por Quique Setién. En esa única temporada en el Benito Villamarín, Lo Celso disputó 45 partidos, marcó 16 goles y repartió 6 asistencias, cifras que evidencian su impacto en el equipo.
El centrocampista, que había llegado cedido por el Paris Saint-Germain, fue tan importante que el Betis decidió ejercer la opción de compra al final de esa campaña. Sin embargo, poco después, el club sevillano se vio obligado a venderlo al Tottenham Hotspur. Dolió, pero hubiese sido un acto de irresponsabilidad imperdonable el rechazar semejante oferta del fútbol inglés. Ahí, por desgracia, se torció todo para el argentino. Nunca consiguió brillar como en Sevilla. Su estancia en Londres estuvo marcada por las lesiones y la falta de continuidad. Por ello, él necesitaba al Betis antes de que los verdiblancos le necesitaron a él.
Gio Lo Celso ya dejó detalles de su enorme calidad en su anterior etapa en el Betis.
🔝 Un refuerzo necesario tras las bajas de Isco y Fekir
La temporada del Betis comenzó con dos golpes duros. Primero se anunció la recaída de Isco, y más tarde la salida de Fekir. Sus dos futbolistas más talentosos se habían quedado en fuera de los planes a corto y medio plazo del Betis. Entonces, los verdiblancos se vieron obligados a fichar a un jugador de un perfil similar. Tras no poder traer de vuelta a Dani Ceballos, apareció a última hora Lo Celso. El Tottenham lo quería fuera, y aceptaron los cuatro millones de euros que ofrecía el Betis. Además, para redondear el acuerdo, incluyeron un acuerdo preferencial para contratar al prometedor Johnny Cardoso en el futuro.
Giovanni Lo Celso llegó con el desafío de volver a ser ese jugador diferencial que brilló en su primera etapa en el Betis… y lo ha conseguido casi de inmediato. Pese a que ya han pasado varios años, se siente como si nunca se hubiese quitado la camiseta verdiblanca. Sigue siendo aquel futbolista que enamoró al Betis. Ya se ha notado su influencia en estos primeros partidos, de hecho. Con 27 años, el argentino está en la madurez de su carrera y, si las lesiones lo respetan, tiene todo el potencial para elevar el techo de un Betis al que no le falta talento. Puede ser el canalizador de todo el equipo, la superestrella que hace mejores a los que le rodean.
A nivel táctico, Lo Celso va a ocupar el rol que venían desempeñando Isco y Fekir. Su visión de juego, precisión en los pases y capacidad para generar oportunidades de gol son habilidades que encajan perfectamente en el estilo de juego del Betis de Pellegrini. Además, su capacidad para romper líneas con conducciones y su llegada desde segunda línea pueden ser un arma letal para el equipo en los momentos en los que necesiten abrir defensas cerradas, cosa que ya se ha visto en esta campaña. Y es que no se queda ahí, porque llega con un punto más de experiencia que lo hace un futbolista aún mejor. Aunque no haya jugado mucho fuera del Benito Villamarín, los años han servido para que envejezca como el buen vino.
El retorno de Lo Celso ha sido recibido con entusiasmo por la afición del Betis, que guarda un grato recuerdo de su primera etapa en el club. Tras su gran rendimiento en estos primeros partidos de su segunda etapa, es lo normal. Lo tiene todo en su mano para demostrar que algunas segundas partes sí que pueden ser buenas. Su llegada Lo Celso es una bocanada de aire fresco para un Betis que aspira a mantener su competitividad tanto en LaLiga como en competiciones europeas. Los puntos ya llegarán, más aún si está otra vez Lo Celso marcando los tiempos de los verdiblancos desde el centro del campo.
