Lauren James, jugadora del Chelsea, fue expulsada el pasado lunes en el partido de octavos de final del Mundial de fútbol femenino celebrado entre Inglaterra y Nigeria por pisar la espalda de la nigeriana Michelle Alozie en el minuto 87. El encuentro terminó en empate cero, pero con victoria final de las inglesas en la tanda de penaltis
El comunicado de la organización señala que «la Comisión Disciplinaria de la FIFA ha impuesto una suspensión de dos partidos a la jugadora de Inglaterra, Lauren James, por una violación del artículo 14 del Código Disciplinario de la FIFA en el partido de la Copa Mundial Femenina de la FIFA Inglaterra vs. Nigeria. La suspensión se cumplirá para los cuartos de final de la Copa Mundial Femenina de la FIFA y el siguiente encuentro internacional”.
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Bien es cierto que se esperaba que la sanción fuera de tres partidos. Sin embargo, el Comité disciplinario de la FIFA dictaminó finalmente que la acción de James debía ser considerada como «juego sucio grave», y no como «conducta violenta», que lo que conduce a que la suspensión sea de dos encuentros y no de tres.
Es verdad que el pisotón de James no fue especialmente violento, pero desde luego resultó intolerablemente premeditado y sucio, lo que deja en un pésimo lugar a la futbolista del Chelsea.
El equipo de Sarina Wiegman, entrenadora holandesa de la selección inglesa, se enfrentará a las “cafeteras” de Colombia este próximo sábado en Sydney antes de una posible semifinal el miércoles en caso de resultar vencedoras.
