La FIFA anunció el miércoles que Fatma Samoura, su secretaria general, dejará el cargo en diciembre tras siete años en los que jugó un papel decisivo en la transformación del organismo, sobre todo en el ámbito del fútbol femenino.
Fatma Samoura aseguró que su intención era comunicar su adiós primero a los miembros del Consejo de la FIFA, pero que la «creciente especulación» sobre su posición en los próximos meses le ha llevado a anunciarlo oficialmente. De momento, eso sí, está centrada en las tareas que la incumben: «Estoy enfocada en la preparación y entrega de la próxima Copa Mundial Femenina en Australia y Nueva Zelanda«.
La secretaria de la FIFA aseguró que se marcha para «pasar más tiempo» con su familia, no sin agradecer el orgullo que siente por haber formado parte del máximo organismo internacional: «He estado enamorada del fútbol desde que tenía ocho años y me siento honrada de haber estado en este viaje. Unirme a la FIFA fue la mejor decisión de mi vida. Estoy muy orgullosa de haber dirigido un equipo tan diverso. Mis primeras palabras de agradecimiento van dirigidas a Gianni Infantino por haberme dado este trabajo de ensueño. Ha demostrado confianza, comprensión y un increíble nivel de apoyo».
La senegalesa, que ha conseguido desde la FIFA dar más visibilidad al fútbol femenino, fue exfuncionaria de las Naciones Unidas en países como Camerún, Chad, Guinea, Níger, Madagascar, Nigeria o República de Yibuti, todos lugares afectados por la guerra, la violencia y la falta de derechos de la mujer.
Samoura alabó el «lenguaje universal del fútbol», capaz de lograr que grupos enfrentados dejen las armas. De momento, hasta diciembre, ejercerá de secretaria como hasta ahora, con un papel clave en el próximo Mundial Femenino.