La FIFA lanzará este mes el tercer ciclo del programa FIFA Forward que la organización creó en 2016 para facilitar la financiación de inversiones que impulsen el desarrollo del fútbol a escala mundial.
Desde su arranque, el programa ha hecho posible la adjudicación de más de 2.800 millones de dólares para materializar los planes diseñados a tal fin por las 211 federaciones y seis confederaciones que son miembros de la entidad.
Tras las dos primeras fases del proyecto –FIFA Forward 1.0 (2016-2018) y FIFA Forward 2.0 (2018-2022)—, el tercer ciclo tendrá una duración de cuatro años y supondrá un incremento de casi el 30% en la cifra total de inversiones gracias a las mejoras conseguidas en la situación financiera de la organización.
Una parte importante de este incremento se destinará a hacer posible el objetivo de contar con 60 millones de jugadoras de fútbol en todo el mundo en 2026, es decir, al final de la ejecución de FIFA Forward 3.0.
Reparto de las ayudas
La distribución de la financiación de este tercer ciclo de FIFA Forward se hará de la siguiente forma:
Hasta cinco millones de dólares para cada federación miembro con el fin de que estas puedan cubrir los gastos operativos que les genera la realización de sus actividades.
Tres millones por federación, a fin de que cada una ejecute planes y proyectos que contribuyan a alcanzar objetivos a largo plazo en beneficio del desarrollo del fútbol.
Hasta 1,2 millones para aquellas federaciones miembro que necesitan más ayuda para cubrir los gastos de sus selecciones nacionales.
60 millones de para cada confederación, con el fin de que desarrollen, promuevan y organicen el fútbol en las regiones a las pertenecen sus respectivas federaciones.
Hasta cinco millones de dólares para cada federación regional o de una zona geográfica determinada, a fin de que organicen competiciones de fútbol masculinas, femeninas y juveniles en su territorio.
Además, la FIFA continuará prestando a sus miembros diversas ayudas de otra naturaleza, como herramientas digitales y experiencias en el desarrollo de capacidades y oportunidades para el intercambio de conocimientos.
Al igual que en las dos anteriores versiones del programa, la FIFA y las federaciones miembro o confederaciones firmarán un contrato de objetivos para acceder a la financiación que facilita Forward 3.0 y se aplicarán mecanismos de control para garantizar la transparencia en la ejecución del programa, supervisar el uso de los fondos y disponer de información detallada sobre sus efectos y legado.
