Desde que el Hamburgo descendió por primera vez en su historia, en 2018, ha rozado el ascenso en todas las temporadas y cada vez se ha acercado más al objetivo, pero no hay manera. La última fue la más surrealista para una entidad que ha pasado de ganar seis veces la Bundesliga (todas antes de que se refundara la competición tras la unificación de Alemania), a ser el hazmerreír del país. Salvo milagro ante el Stuttgart, les espera, al menos, un año más fuera del primer nivel.
Parece que no se volverá a poner en marcha su icónico reloj, que marcaba los años, días, horas, minutos y segundos que le hacían ser el único club que siempre había estado en la Bundesliga.
🫣 El traumático descuento para el Hamburgo
Esta temporada parecía que sería la buena. No tanto por el contexto, ya que llegaba a la última jornada sin depender de sí mismo. El que contaba con ese privilegio, juntó al ya matemáticamente ascendido Darmatadt, era el Heidenheim. Tenían la oportunidad de sumar el primer ascenso de su historia a la primera categoría de la Bundesliga e, incluso, de proclamarse campeones de la segunda división alemana en caso de que el líder cayese, algo que sucedió. Con estrépito, además, goleado por 4-0 contra el Greuther Fürth.
Drama in Sandhausen! Platzsturm, dann missverständliche Infos aus Regensburg und am Ende doch die Gewissheit: Es reicht nicht zum direkten Aufstieg für den HSV! #hsv #sky2buli #svshsv pic.twitter.com/7lvxdK4Wrz
— Sky Sport (@SkySportDE) May 28, 2023
El Hamburgo también hizo los deberes y ganó (0-1) al Sandhausen. El partido concluyó y hubo una explosión de júbilo entre la hinchada visitante, que invadió el campo de su rival para festejar el ascenso, a sabiendas de que el Heidenheim estaba perdiendo (1-2) ante el Jahn Regensburg. Demasiado bonito para ser verdad. Y demasiado fácil para tratarse del ‘Dinosaurio’. El jarro de agua fría que recibieron fue apocalíptico mientras algunos ya planeaban el regreso a la élite. Efectivamente, el Heidenheim marcó dos goles en el descuento, que le hicieron pasar en cinco minutos de la tercera plaza a la primera. El Hamburgo, obligado a jugar otra vez el playoff de ascenso.
😓 Un equipo reincidente
Ante esa situación, solo quedaba resignarse, ver el vaso medio lleno y armarse de valor para, de una vez por todas, dejar atrás esta pesadilla de la Bundesliga 2. Solo tenían que ganar la eliminatoria, de ida y vuelta, contra el Stuttgart. Muy fácil en la teoría, pero no en la práctica. El antepenúltimo clasificado de la presente Bundesliga terminó de hundir a otro histórico del fútbol teutón en el primer choque, gracias a la jerarquía de muchos de sus jugadores.
El 3-0 parece irremontable, no solo por cómo ha sido la última semana en Hamburgo, sino porque, incluso, el resultado fue la mejor noticia para ellos, visto el trámite del encuentro. Todo parece indicar, por tanto, que el Hamburgo está abocado a permanecer un año más en segunda división, después de ver como el Hertha Berlin le remontaba hace un año en esta misma instancia. Y tras de ser el cuarto clasificado en sus tres primeras campañas en la división de plata.
👎 Su histórico descenso
Filip Kostić llegó al Hamburgo en 2016, procedente del Stuttgart, y salió del club una vez se consumó el descenso en 2018, rumbo al Eintracht Frankfurt.
Cuando el Hamburgo cayó hace cinco años a la Bundesliga 2 parecía complicado que fuese a estar tanto tiempo fuera de la élite. Por aquel entonces, Filip Kostić era su estrella, arropado por otros ilustres como Douglas Santos, Albin Ekdal, Kyriakos Papadopoulos o Luca Waldschmidt, dirigidos por Christian Titz.
Aunque, en realidad, no es el único histórico que lleva años en las catacumbas del fútbol alemán. El Werder Bremen o el propio Stuttgart también descendieron recientemente. Por tanto, tres de los cinco equipos con más temporadas en primera, junto a Bayern y Borussia Dortmund, saben lo que es perder la categoría en el último lustro. Schalke 04 y Hertha Berlín, que volverán a jugar en segunda división la temporada que viene, son otros gigantes que viven una crisis profunda, al igual que Kaiserslautern, Núremberg o Hannover 96.
