El Atlético de Madrid volvió a recuperar la fe. En realidad nunca la habían perdido, por aquello de creer hasta en las últimas consecuencias. Pero ahora están viviendo un momento especial postulándose como serio candidato a ganar el título de LaLiga tras ver como FC Barcelona y Real Madrid se van dejando puntos por el camino.
Pero sobre todo haciéndoles frente, especialmente a los culés, a los que ganaron en la última jugada de un partido en el que los de Simeone apuraron hasta el final para llevarse un encuentro que los hace ya líderes y campeones de invierno.
El Atlético de Madrid se agranda para pelear LaLiga
Porque los del ‘Cholo’ viven un final de año de ensueño con una racha de victorias que les deja líderes en solitario por encima del FC Barcelona y uno por delante del Real Madrid, y aún los dos de la capital con un partido menos en su haber.
Entonces, ¿es justo pronosticar que, a estas alturas, el Atlético de Madrid pueda hacerse con LaLiga? La realidad es que sí. Y no solo por su inmaculada racha de victorias desde el partido contra el Betis, donde cayeron por un 1-0, sino por todo lo que han venido demostrando.
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Porque sí; bien por trayectoria, por confianza, por convicción en la idea que amarran los de Simeone desde que se creyeran que podían, por fondo de plantilla, por disponibilidad de jugadores o por capacidad por encuentros como el vivido en Montjuic, no hay un solo argumento que no convierta al Atlético de Madrid a postularse para ganar LaLiga.
Un cambio de filosofía en la intensidad de los suplentes
Sí es cierto que no empezaron la temporada de la mejor manera posible, dejando un octubre muy negro para las aspiraciones rojiblancas: cinco partidos con sólo una victoria ante el Leganés, un empate en Anoeta, y tres derrotas dolorosas, sobre todo, las dos en Europa ante el Benfica (4-0) y Lille (1-3). La tercera derrota fue en liga ante el Betis en el Villamarín.
El problema, entonces, es que había flaquezas de intensidad en los últimos minutos de choque, en concreto con los jugadores que salían del banquillo.
Pero Simeone encontró y supo dar con la tecla, ello se vio en partidos como contra el FC Barcelona, pues el gol de la victoria fue asistido por Molina y anotado por Sorloth, dos hombres que salieron en la segunda mitad. Otra bala como Correa ha sido decisivo en estos tramos finales, con goles a Athletic en el 94′, Real Madrid en el 95′ o PSG en el 96′.
Pero no solo en ataque ha conseguido Simeone agrandar a su equipo. También en defensa, con la inclusión de Javi Galán, Lenglet o Giménez, así como la aparición de un estratosférico Giuliano que dota a un Atlético cargado de partidos esta temporada.
Simeone consiguió contagiar su energía
Así, desde esa última derrota ante los verdiblancos a finales de octubre, los colchoneros lo han ganado todo: doce victorias seguidas en los últimos doce encuentros entre liga, copa y Champions que ha dejado a los del Metropolitano con un noviembre y diciembre para enmarcar.
Un aspecto importante, además, es que este Atlético de Madrid -de momento- está cumpliendo con las expectativas que se colgaron después de un verano de refuerzos más que importante, con Gallagher, Julián Álvarez, Robin Le Normand y Alexander Sorloth.
En este sentido, lo que sí tienen respecto a otras temporadas es que compite mejor. Y lo bueno de todo esto es que compite mejor cuando juega bien, pero también cuando, a veces, la suerte nos les acompaña y no les sale su juego más fluido, como por ejemplo sucedió ante el Getafe (1-0) o ante el Sevilla (4-3), que lograron sacar el partido aún de que sus rivales les pusieron contra las cuerdas.
Con todo, de momento Simeone está consiguiendo contagiar la energía para sufrir muchos minutos y dar la estocada final, como un buen boxeador de pesos pesados sabiendo cuándo asestar el golpe definitivo, y de momento esto le hace ser líder en LaLiga y soñar con entrar entre los 8 mejores en la Champions. En la mano del ‘partido a partido’ están gran parte de las aspiraciones colchoneras de volver a levantar un título este año.
