Solo tres de los 23 Grandes Premios disputados en la temporada de Fórmula 1 que se cerró el pasado 26 de noviembre en el circuito Yas Marina de Abu Dabi se han desarrollado en los Estados Unidos; un 13%. Fueron los de Austin (donde Fernando Alonso hizo podio), Miami (solo desde 2022) y Las Vegas (por primera vez).
Sin embargo, prácticamente la mitad de las empresas que patrocinan la competición o cualquiera de las escuderías que compiten en ella son americanas.
Una presencia creciente
El dato puede parecer, en principio, poco significativo, puesto que en la mayor parte de los casos se trata de marcas globales, que desarrollan sus actividades a escala internacional, al margen de que su sede legal esté o no en los Estados Unidos.
No obstante, el asunto deja de parecer menos relevante si se tiene en cuenta que las compañías norteamericanas patrocinan la Fórmula 1 solo desde 2017. En ese año, Liberty Media, la corporación de medios de comunicación de muy diverso tipo con sede en el Estado de Colorado, fue pionera de ese desembarco, acompañada de inmediato por otras.
Desde entonces, es decir, en apenas siete años, el número de marcas de los Estados Unidos que patrocinan circuitos, carreras o equipos de la F1 se ha más que duplicado y son ya 110, lo que equivale al 45 por ciento de los espónsores totales de la competición. No es la mitad, pero casi. Y, según previsiones de Sponsor United, se estima que los patrocinadores estadunidenses del ‘Gran Circo’ superarán a los europeos en apenas un par de años.
Patrocinadores norteamericanos de muy diverso tipo
Es verdad que marcas europeas estrechamente relacionadas con el suministro de productos para el deporte son las que cuentan actualmente con un mayor número de patrocinios en la Fórmula 1.
Por ejemplo, la italiana Pirelli, que es Global Tire Partner de la competición desde el año 2011, provee de neumáticos a las 10 escuderías que participan en ella. Y lo seguirá haciendo hasta el año 2027, de acuerdo con el contrato que ha renovado no hace mucho.
Varias empresas europeas de prendas deportivas, como AlpineStars, Puma o Alpha Tauri (la marca de ropa que incluso da nombre a uno de los equipos, por iniciativa de su matriz, Red Bull), cuentan con tres patrocinios. Pero, inmediatamente después, empiezan a aparecer en el ranking compañías estadounidenses, como Hewlett-Packard, asimismo con tres patrocinios; o la muy famosa Amazon de Jeff Bezos y la empresa de “software” Salesforce, con dos.
Otro síntoma del mismo fenómeno: el equipo McLaren, que es el que suma un mayor número de patrocinios, con hasta 57 marcas, tiene asimismo un 45% de patrocinadores norteamericanos, entre ellos los hoteles Hilton, Google Chrome y la marca de ropa deportiva New Era. Y la propia Alpha Tauri, que ocupa el tercer lugar, con 47, tiene a Therabody y Walmart, entre otras conocidas marcas estadounidenses.
Capital árabe en los naming rights de los circuitos de Fórmula 1
Por el contrario, no habrá empresas de EE. UU. que posean los naming rights en los circuitos en los que se desarrollarán las carreras de la próxima temporada. Ni siquiera en las tres que volverán a celebrarse en el país americano. Sus “sponsors” serán Pirelli (Austin), Cyprto.com (Miami) y Heineken (Las Vegas).
Eso sí, tampoco la mayor parte de esos espónsores que den nombre a las carreras serán europeos. Casi la mitad de los naming rights de los circuitos, concretamente nueve de los 21 que cuentan con patrocinador (hay cuatro que aún no tienen), serán ostentados por empresas de capital árabe, con Qatar Airways liderando la lista, con cuatro.
Por cierto, entre esos nueve estará el Gran Premio de España, que se desarrollará a finales de junio con el patrocinio de Saudi Aramco.