La NHL es una de las cuatro grandes ligas de Estados Unidos. Tanto en términos de popularidad como económicos es la menos relevante, sin embargo, cuenta igualmente con un importante seguimiento en el país de las barras y las estrellas y especialmente en Canadá. En Europa, más allá de países como Suecia, Finlandia, República Checa o Rusia donde goza de algo más de seguimiento, es muy poco conocida. Aunque hay una circunstancia por la que la NHL es conocida en todos lados: las peleas.
En la mejor liga de hockey sobre hielo del planeta las peleas a puñetazo limpio entre dos rivales están permitidas. Por lo general, en cualquier deporte que no sea de contacto estas tienen graves sanciones con duras consecuencias para los deportistas implicados, algo que no ocurre en la NHL. Parece algo surrealista, pero lo cierto es que esta norma se recoge en la Regla 56 que se introdujo en el reglamento de la NHL en 1922. Si dicho enfrentamiento sigue las reglas establecidas, como mucho, tendrá un pequeño castigo que equivaldrá a una exclusión de cinco minutos de aislamiento en box de penalizaciones.
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🏥 Evitar lesiones de gravedad, la prioridad de la NHL
Gary Bettman, comisionado de la NHL, explicó hace unos años la principal razón sobre por qué se permiten las peleas: «previenen lesiones serias y son un termómetro de lo que sucede en el terreno de juego«. Muchos se preguntarán como se pueden evitar las lesiones si se permite a dos jugadores golpearse, no parece tener mucha lógica, pese a ello esta afirmación está en lo cierto.
Las peleas que se producen en la NHL se permiten siempre y cuando sigan unas normas. Los jugadores pueden golpearse a puñetazos con una mano mientras se agarran de la camiseta con la otra. Ambos deben soltar sus sticks y quitarse los guantes. La pelea se detendrá inmediatamente en el momento en el que estos pierdan el equilibrio y caigan al suelo. Que otros compañeros se involucren está totalmente prohibido, así como golpear a los árbitros. Tampoco pueden darse con ningún objeto como el casco o los propios palos.
Rob Rey es el jugador con más peleas en la historia de la NHL (379).
Los profesionales de hockey sobre hielo pueden patinar rondando casi a 50 km/h, y lo hacen con un stick en la mano. Permitir los enfrentamientos en un deporte tan físico como el hockey sobre hielo evita que se produzcan otros conflictos que podrían llevar a consecuencias más graves. De este modo los jugadores descargan tensiones y la situación, salvo en contadas ocasiones nunca se desmadra. Esto evita que los jugadores se lesionen de gravedad por el uso de objetos o que al involucrarse una multitud puedan sufrir heridas graves con las cuchillas de los patines.
En la temporada 2023/2024 varios medios se escandalizaron tras las imágenes de la pelea entre Matt Rempe, jugador de 21 años de New York Rangers, y el veterano de 33 años Nicolas Deslauriers de Philadelphia Flyers. Las imágenes pueden ser impactantes, sin embargo, todo ocurre dentro de la legalidad. Fue una dura lucha sí, pero no todo vale.
Para los que piensan que no se puede permitir solo tienen que observar el duelo entre los San Jose Sharks y los Anaheim Ducks perteneciente a la temporada 2015/2016. Allí, Raffi Torres causó una conmoción cerebral a Jakob Silfverberg al golpearle por el lado ciego. Fue expulsado automáticamente y posteriormente recibió una sanción ejemplar. La NHL le castigó sin jugar durante 41 partidos, media temporada, en lo que fue la pena más alta de la historia de la competición. Dicha acción marcó la carrera de un Torres al que la liga volvió la espalda hasta el punto de que terminó retirándose.
🥊 La figura del enforcer y el espectáculo
Las peleas se han convertido además en un elemento más de la NHL y es una de las principales razones por las que los aficionados acuden a ver los partidos. Un partido puede pasar de malo a bueno si hay uno o varios enfrentamientos sobre el hielo. De hecho, hay jugadores dentro de los equipos que se especializan casi exclusivamente en las peleas y en evitar que sus compañeros más talentosos sufran daño y son conocidos como enforcer.
El joven Matt Rempe, famoso por la pelea frente Nicolas Deslauriers, tiene talento, aunque podría ser un enforcer perfecto. El rookie de los Rangers ha tenido varias peleas, y es que en sus cinco primeros partidos en la NHL se fue a los golpes contra un rival en tres de ellos. A sus 21 años el novato va camino de convertirse en leyenda de la competición.
Jugadores como Rob Ray (379 peleas y 3.207 minutos de penalización a lo largo de toda su carrera), Chris ‘Knuckles‘ Nilan (329 peleas y 3.043 minutos de castigo), Tie Domi (339 peleas y 3.515 minutos de penalización), Joey Kocur (359 peleas y 2.519 minutos de castigo) o Bob Probert (304 peleas y 3.300 minutos de penalización) son varios de los nombres que salen a relucir cuando se habla de los mejores enforcers de la historia. La NHL es una liga que se muestra orgullosa de ellos y así lo muestra en sus redes sociales, por lo que su lema es que si no estás sensibilizado para ello, simplemente no lo sigas.
