A finales de 2023, los aficionados del Watford vieron como se cristalizaba una propuesta que hacía honor a la persona más importante de su historia. Occupation Road era la calle de la grada que lleva el nombre de Sir Elton John, y el ayuntamiento aceptó que pasase a llamarse Yellow Brick Road en honor a su canción ‘Goodbye Yellow Brick Road‘. «Es una forma realmente fantástica de reconocer un momento en el que estuve aquí casi todos los días«, dijo el propio Elton John. Ese periodo del que habla el legendario artista es uno en el que él tocó el cielo como artista y tocó el infierno en su vida personal. Si no es por el Watford, no se sabe que hubiese sido de ‘Rocketman‘… ni qué hubiese sido del que fue el peor club del fútbol profesional inglés.
🤩 El mejor presidente milagro del fútbol inglés
Elton John siempre tuvo una relación complicada con su padre, pero eso no le impidió heredar los colores del Watford. Su progenitor era aficionado de los hornets, y su visita conjunta a Vicarage Road era uno de los pocos recuerdos agradables que compartían. Por ello, cuando en 1974 estaba en la cresta de la ola, la propuesta de comprar acciones del club tenía sentido. O, al menos, lo tenía desde el punto de vista emocional, porque desde el empresarial era algo más parecido a un acto de fe. El Watford era el último club profesional del país. De 92 equipos, ellos marcaban el límite entre los amateurs y los que se ganaban la vida con el fútbol. Sus instalaciones, como no, reflejaban ese estado de descomposición de una institución en su estado.
Pese a ello, hubo algo que le mantuvo pegado a su nueva inversión. Estar allí, además de ayudarle a conectar con sus colores, le mantenía lejos de su infierno personal. Durante aquellos años, Elton John tuvo un problema serio con las adicciones. El tiempo que estuviese trabajando en levantar al Watford era tiempo en el que no tiraba su vida por el retrete. «Ver correr a los jugadores era como tomar una droga de la que te volvías adicto«, dijo a posteriori en su biografía. Si los hornets evitaban que tocase el infierno, ¿por qué no iba a hacer él lo mismo por ellos? Elton John lo tenía claro: la simbiosis con el equipo de su vida era lo único que separaba a ambos de la desaparición.
Elton John llegó al Watford en 1974 como accionista, y en 1977 se hizo el presidente del club de su vida.
En 1977 pasó a ser el presidente, y comenzó la remontada del Watford. John Barnes, legendario futbolista inglés, llegó como un adolescente en esos primeros años de mandato, así como el goleador Luther Blisset. No tardaron en ser los pilares del equipo de Graham Taylor y su fulgurante ascenso. Con Elton John en los despachos, los hornets acabaron segundos en la First Division de la temporada 1982/1983. Actualmente, sigue siendo la mejor temporada de la historia de un club centenario. Para añadirle más leña al fuego, en 1984 perdieron la final de la FA Cup ante el Everton. En 10 años, Elton John transformó al peor equipo profesional del país en uno de los mejores. No tardó en llegar la estabilidad financiera que les mantuvo en las primeras divisiones del país. Club y presidente se habían salvado mutuamente.
🫂 Elton John, uno di noi para la afición del Watford
Los años 80 subrayaron esa necesidad de Watford y Elton John de estar juntos. Esos demonios que atormentaban al cantante seguían ahí, pero también estaba su salvavidas. Mientras afirma que tiene lagunas de aquellos años, subraya que recuerda «todos los partidos» que vio en Vicarage Road. «Le debo al Watford mucho más de lo que el equipo me debe a mí. Fui presidente durante el peor período de mi vida. Cuando sentía que no había amor, sabía que tendría el del club y el de los aficionados (…). Si no hubiera tenido el club de fútbol, Dios sabe qué hubiera sido de mí. No exagero cuando digo que estoy convencido de que el Watford me salvó la vida», dijo en su biografía.
Pese a ello, los hornets no pueden aceptarle el agradecimiento por salvarle de sus demonios. Hubiesen hecho lo mismo por cualquier otro que sintiese el Watford como ellos. Él había estado ahí en los peores momentos, y no dejaba de ser uno más de los que llenan el estadio cada semana. Por mucho que dejase la presidencia (volvió en 1997 para marcharse de nuevo en 2002), ya formaba parte de la idiosincrasia del club. Ponerle su nombre a una grada y luego renombrar una de las calles del estadio era lo mínimo que podían hacer.
Así, ‘I’m still standing‘ se convierte en algo más que una simple canción. Salió durante esa década de los 80 en los que Elton John tuvo al Watford como contrapunto de su vida personal. «¿No sabes que aún estoy de pie, mejor que nunca? Me veo como un auténtico superviviente, como un niño pequeño», reza el estribillo de la canción. Si bien es extrapolable a la lucha del artista contra sus adicciones, puede resumir esa resiliencia del Watford en aquellos años. Resistieron su terrible situación para seguir en pie. Fueron supervivientes que se ganaron una nueva oportunidad, tal y como si volvieran a nacer. Y con este, hay mil mensajes más de su música que se pueden extrapolar a lo vivido en Vicarage Road. Desde ‘Rocketman‘ hasta ‘Your song‘, sus obras siempre tendrán un significado especial entre la gente que fue su refugio en sus peores momentos.
