Del dicho al hecho, hay un trecho. No hay más que ver lo que ha sucedido con la Superliga Africana de clubes, una competición presentada hace un año cuya reglamentación ha cambiado de forma drástica. Se puede hablar de una europeización del torneo, al menos en su primera edición. Porque si bien el modelo parecía distar en un principio en muchos aspectos respecto a la que anunciaron los promotores de la Superliga Europea, la realidad es completamente diferente.
📝 ¿Cómo iba a ser la Superliga Africana?
En un principio, el modelo presentado en el verano de 2022 sostenía un formato de competición conformado por 24 clubes de 16 países, divididos en tres grupos de ocho equipos cada uno (separados en norte, centro y sur del continente). De carácter anual, entre los meses de agosto y mayo. El cálculo era de 197 partidos, con un máximo de 21 por equipo. Lo cual, por pura lógica, complicaría bastante su compatibilidad con el resto de competiciones vigentes. Además, la idea era añadir ascensos y descensos.
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¿Cómo sería el reparto económico? El ganador ingresaría 11 millones de dólares y cada una de las 54 federaciones que conforman la confederación africana (CAF) cobrarían un millón más. Además, otros 50 millones iban a ser destinados, sin especificar reparto, para la creación o el desarrollo del fútbol femenino, las academias juveniles, infraestructuras y finanzas de clubes.
🇪🇺 Diferencias respecto a la Superliga Europea
La Superliga de África tenía similitudes respecto a la Superliga propuesta en Europa por formato, aunque también la gran diferencia de que, aquí, FIFA y CAF son impulsores. Sin embargo, UEFA y FIFA, que defienden el modelo de la Champions League, se opusieron en Europa. Y en el caso del ‘Viejo Continente’ cabe resaltar que la Superliga era una alternativa sustitutiva a la Liga de Campeones. A diferencia de la propuesta respecto a las ligas domésticas europeas, a las que Florentino Pérez, Joan Laporta y Andrea Agnelli sí consideraban complementarias a su nuevo proyecto continental.
Concretamente, en Europa se anunció una Superliga semicerrada. Es decir, conformada por 15 clubes fundadores que estarían en cada edición y cinco invitados por méritos deportivos. Algo que no parecía que fuese a suceder en África, pero que, al final, sí se asemejará más de lo previsto a esa idea. En el caso de la europea, el formato de competición entre estos clubes implicaba una división en dos grupos de diez equipos, que derivasen en una fase eliminatoria tal y como la conocemos actualmente en la Champions League. En total, 197 partidos también. Entre un mínimo de 18 y un máximo de 25 disputados por cada plantel.
🤦 ¿Cómo será la Superliga de África?
Finalmente, para esta primera edición solo contarán con ocho equipos de ocho países diferentes, que han accedido a jugar el torneo en condición de invitados. Lo cual dista enormemente de la idea inicial y se aproxima mucho más al modelo europeo. No por el formato de competición (se omite la fase de grupos para disputar directamente los cuartos, semifinales y final); sino, sobre todo, por el trasfondo. Se trata de una primera edición cerrada y bastante ajena a los méritos deportivos, por mucho que vayan superpotencias de cada nación. Estas serán las primeras eliminatorias.
🇹🇿 Simba – Al-Ahly 🇪🇬
🇨🇩 TP Mazembe – Esperance Tunis 🇹🇳
🇳🇬 Enyimba – Wydad Casablanca 🇲🇦
🇦🇴 Petroatletico Luanda – Mamelodi Sundowns 🇿🇦
Por el camino se pierden clubes históricos de África, como el Zamalek egipcio, Raja Casablanca marroquí, Étoile Sportive du Sahel tunecino, Entente Sportive de Sétif argelino, o Kaizer Chiefs y Orlando Pirates sudafricanos. Estos, sin embargo, competirán en la Champions africana, que se desarrollará con normalidad y que apunta a que se mantendrá como el certamen más prestigioso de África en el ámbito de clubes.