Nápoles es una de esas ciudades que no deja indiferente a nadie. Puede ser que la realidad de la ciudad esté en el término medio entre su adoración y la repulsión más absoluta, pero es que la ciudad partenopea nunca fue amiga de la moderación. Aun así, su fútbol ha conseguido sobrepasar esa frontera de la subjetividad. Con la consecución del Scudetto 33 años después de que Maradona volviese a obrar milagros a orillas del Mediterráneo, se ha desatado una oleada de simpatía con el Napoli. ¿Es por el estilo alegre del equipo? ¿O por el carisma de sus jugadores? ¿Hay algo que se nos está escapando en torno a uno de los equipos de la temporada?
🎉 Triunfo inesperado, alegría de todos
Para analizar el triunfo que ha devuelto a Maradona a lo terrenal, desde Legal Sport hemos contactado con Filippo Ricci, corresponsal de la Gazzetta dello Sport. Pocos hispanohablantes hay que dominen más el fútbol italiano y sus peculiaridades, aquellas que le dan ese sabor tan distintivo al Calcio. Y es que, si hay algo que hace especial a este deporte, es la posibilidad de superación y redención. Ni en un país de contrastes iban a dejar pasar por alto la historia de un underdog, más aún cuando en cada rincón hay un napolitano orgulloso dispuesto a compartir la pasión por su equipo y defender la única forma correcta de hacer pizza.
«Es difícil decir que es un equipo pequeño, pero lo cierto es que nunca había llegado a cuartos de final de la Champions League y que no ganaba el título desde hace muchos años. Esto hace que sea un equipo popular y simpático, con una hinchada muy positiva (…). Además, tienen aficionados por todo el mundo porque los italianos han emigrado, y los napolitanos no iban a ser menos. En cualquier lugar hay alguien del Napoli. Y, al final, esa pasión se contagia. Para mí, ahí está la clave», explica el periodista italiano.
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Las casas de apuestas los ponían como el quinto contendiente para llevarse el título. Se llegaba a pagar 15 veces lo apostado si el Napoli ganaba el Scudetto, quedando muy lejos de Milan, Inter, Juventus y Roma. Aunque sí es cierto que ha habido una considerable rotación de campeones del Scudetto en los últimos años, era impensable su rendimiento tras decir adiós en verano a sus estrellas de las últimas temporadas. La hazaña es admirable, tanto que ha dejado de lado la rivalidad inherente entre norte y sur del país. «La recepción del título ha sido cálida, ya que supone un cambio. Hace mucho que no ganaba el Napoli un Scudetto, y el título no bajaba de Florencia desde hace muchos años. En general, existe simpatía cuando gana uno de los equipos inusuales. El aficionado neutral está contento con este triunfo», añade Ricci.
🔟 Un título que recuerda al Napoli de Maradona
Dejando de lado esa simpatía por lo inusual y en la que ha colaborado ese conocido de Napule que todos tenemos, el otro gran aliciente del título es Diego Armando Maradona. No ha podido estar de cuerpo presente en la ciudad para celebrar el triunfo del Napoli, pero eso poco importa para el napolitano: ‘El Diego’ es Dios, y Dios es omnipresente. Allá donde esté, lo habrá celebrado. Sus mejores años de fútbol (que ya es decir) fueron en el sur de Italia, liderando al equipo para conseguir los dos únicos Scudettos que tenía hasta la fecha. Su leyenda alcanzó otra dimensión a orillas del Mediterráneo, haciendo que peregrinar a Nápoles sea obligatorio para todo aficionado. Y es que, si te gusta el fútbol, probablemente admires a Maradona; y si admiras a Maradona, seguramente tu corazón sea tifosi del Napoli.
🗓️ 10/05/87 – 04/05/23
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Pese a ello, hay una diferencia fundamental para Ricci entre este título de Serie A y los que logró ‘El Pelusa’: «Los dos Scudettos que gana el Napoli antes son de Maradona, porque era el mejor del mundo y de la historia, todo era más ‘sencillo’. Este título es un esfuerzo de equipo, es más colectivo«. De lo divino a lo terrenal, que diría aquel. Es lógico, ya que lo que hacía el argentino prácticamente en solitario solo lo puede igualar un equipo unido. Que este título sea algo más mundano ha hecho que sea más sencillo identificarse con el Napoli, pues es la victoria de la constancia. No hay más que ver la carrera de Spalletti, que se ha convertido en el entrenador más veterano en levantar el título. Más de 550 partidos después, como premio a su trayectoria, tiene la guinda del pastel. «Es un himno al esfuerzo, al grupo y el espíritu de equipo. Es una victoria que se ha logrado sin tener mucho dinero, haciendo las cosas bien y sin tener una superestrella. Ahora todos hablan de Kvaratskhelia y Osimhen, pero cuando llegaron no tenían esa vitola de crack. Es una joya de título», comenta el periodista de la Gazzeta dello Sport.
💫 Una cita con la eternidad
Lo que consiguió Maradona se ganó un espacio en el arte callejero de Nápoles. El lugar elegido para inmortalizar a ‘El Diego’ fue un edificio de viviendas en Quarteri Spagnoli. Cuando llegó el día de pintar el mural, se dieron cuenta de que habían tomado mal las medidas. La cara del argentino estaría justo en la ventana de uno de los pisos, pudiéndose fastidiar todo el trabajo hecho. Para evitarlo, se le pidió un imposible a los residentes de la casa afectada: esa ventana no se podría volver a abrir. Por suerte, esto ocurrió en Napule, la ciudad en la que la devoción puede con la lógica. Desde entonces, aquel edificio con una ventana que dejó de ser útil para formar parte de algo divino es el punto de reunión de los hinchas del Napoli, siendo uno de los puntos neurálgicos de las celebraciones de este tercer Scudetto.
El mural de Maradona en Nápoles, lugar de reunión de los aficionados del Napoli.
Seguramente, en un futuro no muy lejano, habrá murales de Kvaratskhelia, Osimhen, Kim Min-Jae y Spaletti. Quizás esta vez midan mejor y no inutilicen nada para inmortalizarlos, porque ese nivel solo está a la altura del más grande. Lo que sí está claro es que, con este título de Serie A del Napoli, han ganado la batalla al olvido. Ellos, cuando no estén en este mundo, seguirán vivos en Nápoles. Porque, aunque tenga sus filias y fobias que tanta división de opiniones generan, es innegable que es una ciudad que cuida de los suyos. A los napolitanos les han permitido volver a reinar en el Calcio, y ellos se lo agradecerán con un hueco en la eternidad por el recuerdo de una temporada que repartió tanta felicidad como buen fútbol.
