Un gol de Mitchell Duke dio la victoria por la mínima la selección de Australia (0-1) ante Túnez. ‘Los canguros’ se repusieron a su dura derrota ante Francia en su debut mundialista en Catar y no acusaron ni lo más mínimo la presión. Como representantes de la confederación asiática, los australianos volvieron a dar un correctivo a los equipos africanos, a pesar de que Túnez había destacado en la primera jornada como uno de los mejores representantes de su continente, gracias a la notable actuación colectiva con la que anularon a Dinamarca.
💥 De Segunda japonesa al Mundial
Mitchell Duke, autor del gol, pasa del anonimato a convertirse en figura de culto para los mundialeros, pues resulta que el atacante milita nada más y nada menos que en la Segunda división de Japón, en el Fagiano Okayama. Su plástico cabezazo, tras el centro de Goodwin, fue suficiente para conseguir una victoria histórica para los Socceroos.
El testarazo de Mitchell Duke se enseñará en todas las universidades de Australia 🇦🇺
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— Gol Mundial (@Gol) November 26, 2022
En volandas por sus aficionados, Túnez tuvo más intención, ilusión y hambre que juego. Pocas ocasiones, en las llegadas de Dräger y Msakni, insuficientes para cumplir las expectativas generadas en su debut contra Dinamarca como una de las selecciones africanas más competitivas.
El gol de Australia descolocó por completo a Túnez, que no supo rehacerse, tampoco con la entrada de Kahzri. Los últimos arreones del combinado dirigido por Jalel Kadri no bastaron para derribar el muro de Matthew Ryan, ex de Valencia y Real Sociedad.
En el tercer enfrentamiento entre ambas selecciones, Australia cosecha su primer triunfo en los últimos ocho partidos (6 derrotas y 1 empate) y rompe así la mala racha de perder por la que no había conseguido ganar ninguno de sus dos primeros choques en sus últimas participaciones mundialistas de 1974 y 2014.
Túnez arriesgó en la segunda mitad, en ningún caso cómodo; siempre a contracorriente. Imprecisiones y precipitaciones constantes entregaron a Australia la posibilidad de cosechar un triunfo que a la postre puede terminar siendo histórico en el devenir del grupo D, cada vez más abierto. A la espera del duelo entre Dinamarca y Francia, Australia está un paso más cerca de pasar a la siguiente fase.