Abdón Prats, el bigote más carismático de la liga española ha vuelto a acaparar portadas en la séptima temporada de su segunda etapa en el Mallorca. La novena en total, si contamos las dos previas a su paso por Mirandés, Tenerife y Racing de Santander. Apenas ha necesitado jugar cuatro partidos para marcar cuatro goles que le sitúan ya como máximo goleador del conjunto bermellón. Y ni siquiera los ha jugado enteros.
En sus últimos 100 minutos, suma todas esas dianas. Le bastó con un cuarto de hora para hacerle un doblete insignificante al Girona, porque el partido ya estaba perdido. Pero, también, anotó el 2-1 contra el Barcelona, que no hace otra cosa que mostrar su tremenda puntualidad. En los días más trascendentes, ninguno como Abdón Prats.
🚀 Con Abdón Prats empezó la resurrección
El canterano mallorquinista, sobrino de Toni Prats, ha marcado 45 goles y repartido 9 asistencias en sus 204 partidos con el cuadro insular. El promedio anotador no está nada mal, aunque, lo mejor de todo, no es lo cuantitativo. Suyo fue el gol que le dio el ascenso a primera división al Mallorca en 2019, uno de los más inesperados de los últimos años. Fue contra el Deportivo De La Coruña, anda que no habría cambiado la historia de los gallegos de no ser por Abdón Prats y sus amigos. El ‘Depor’ se llevó el gato al agua (2-0) en la ida y al Mallorca no le quedaba mucho más que agarrarse al espíritu para voltear la final del playoff de ascenso.
Así lo hizo, gracias a los goles de Ante Budimir, Salva Sevilla y del propio Abdón Prats, respectivamente. Con ese 3-0, el Mallorca regresaba a la élite del fútbol español, a la vez que el ‘9’ se vestía por primera vez de héroe en el club de su vida. O en una de las primeras. Porque, realmente, en la 2017/2018 regresó para rescatar al Mallorca en su momento más delicado y se convirtió en uno de los artífices del ascenso de Segunda B a la categoría de plata, con 12 goles en 10 partidos. Aunque no fue hasta esa vez cuando experimentó una explosión de júbilo sin igual, al celebrar un gol de semejante trascendencia.
🥹 Y con Abdón Prats se selló la permanencia
Se vio que le gustó esa sensación, ya que en 2022 también fue vital para que el Mallorca consiguiese una salvación igual o más inesperada que el mencionado ascenso. Habría que preguntarle a Abdón Prats cuál es el gol de su vida. Por lo pronto, sabemos que estos dos son los que entran en la terna y tenemos indicios de que el segundo de ellos fue aún más emocionante. Muchos creen que esto pasó en la última jornada, pero, en realidad, sucedió en la penúltima. Contra el Rayo Vallecano, en el minuto 92, para darle una victoria a los suyos que les permitió llegar vivos a la última fecha. Ese día también entró desde el banquillo, pocos revulsivos hay mejores que él para dar giros de guion tan drásticos.
El resto es historia. El Mallorca se salvó al ganar también a Osasuna en la cita final, lo que unido a una rocambolesca combinación de resultados, mandó al pozo al Granada de Aitor Karanka. El equipo que, precisamente, dejó de salvarse matemáticamente la semana anterior por culpa del gol de Abdón Prats. En el reino nazarí, tal vez, ‘El Dimoni D’Artà’ no sea bien recibido por aquella historia. Pero, en la isla balear, lo de no afeitarse por completo se pone de moda de vez en cuando. Concretamente, cuando Abdón hace de las suyas, como es el caso. Qué le van a hacer si uno de sus mayores ídolos tiene el bigote más afilado que nunca cuando sube la marea.
