La Federación Internacional de Atletismo (World Athletics) y el Comité Olímpico Internacional han llegado al acuerdo de que la marcha mixta de relevos por equipos haga su debut olímpico en los Juegos que se celebrarán en París el año que viene.
Este relevo mixto contará con 25 equipos, cada uno compuesto por un atleta masculino y una atleta femenina, que deberán completar la distancia del maratón, es decir, algo más de 42 kilómetros, repartidos en cuatro tramos. Cada atleta completará dos tramos de poco más de 10 km cada uno, alternando masculino y femenino.
Esta nueva prueba sustituirá a la de 50 km marcha masculinos del programa, que ha sido suprimida, según fuentes olímpicas, por razones de igualdad, ya que no tiene una equivalente femenina; y, según otras fuentes, porque las televisiones se quejaban de su larga duración.
La nueva prueba ha sido fijada después de varios meses sopesando la posibilidad de que los 50 km de marcha masculinos fueran sustituidos por una competición de 35 km por equipos mixtos. Sin embargo, la idea fue abandonada porque ni contentaba a las televisiones —seguiría siendo demasiado “larga”— ni estaba claro cómo se determinaría el ganador.
En realidad, el sistema de clasificación para la nueva prueba sigue también pendiente de definición, pero, en cambio, sí está decidida su fecha y lugar de celebración. Será el miércoles 7 de agosto, al pie de la Torre Eiffel, a través de un circuito al que habrá que dar dos vueltas, seis días después de que las pruebas individuales de marcha de 20 km. inicien el programa de atletismo olímpico de París.
La decisión no ha caído muy bien entre los atletas
Un cierto número de atletas de la especialidad han expresado su desacuerdo con la decisión a través de las redes sociales, sugiriendo que ha sido precipitada y fruto del interés por llegar a una situación de “igualdad forzada”.
Así, Diego García Carrera, marchador que obtuvo un diploma olímpico en Tokio 2020, ha advertido de que «tomar una decisión así a poco más de un año de los Juegos Olímpicos es una auténtica chapuza. La mitad de mis compañeros de especialidad (los especialistas en distancias largas) están fuera de París».
En línea parecida se ha pronunciado Evan Dunfee, atleta canadiense de marcha: “En 2017 nos dijeron que no había manera de tener una marcha de 50 km para mujeres en Tokio porque era imposible cambiar el programa dentro de 3 años. Ahora, en menos de 500 días, nuestro evento ha cambiado por completo”.
A su vez, el mexicano Raúl González, doble medallista olímpico en Los Ángeles 1984 y entrenador de la especialidad, ha declarado a los medios de su país: “Estoy hablando con algunos de los más representativos medallistas olímpicos del mundo, obviamente también con los medallistas olímpicos mexicanos, para presentar no solo una inconformidad, sino una propuesta nacida desde quienes lo practican, lo practicaron y ganaron medallas olímpicas y tengan legitimidad; es una propuesta viable y con razones y bases técnicas, estoy hablando con mucha gente de Italia, Colombia, Ecuador y España para hacer una propuesta concreta (…) será en estos días y la propuesta será dirigida a World Athletics y al Comité Olímpico Internacional”.
