Terminó el Premier Pádel de Roma, uno de los cuatro majors del año, los que reparten 2.000 puntos y son apodados como los ‘Grand Slam’ del pádel. El escenario ha sido fabuloso: el Foro Itálico, legendario complejo deportivo ubicado a los pies del Monte Mario.
Italia ya es padelera. Hay una afición real y nutrida que, además, como es característico en los azzurri, es apasionada y alegre. Tiene el apoyo del presidente de la FIP, Luigi Carraro, que se ha propuesto que su país natal sea la capital mundial del pádel.
La semana fue muy intensa, dentro y fuera de las pistas.
🌟 Los cracks: Galán-Chingotto y Sánchez-Josemaría
Las chicas no tuvieron rivales durante todo el torneo. Gemma Triay y Claudia Fernández, a priori la única pareja que podía plantarles cara, cayeron en semifinales ante las veteranas Patty Llaguno y Lucía Sainz. La final duró menos de una hora y se la llevaron la catalana y la extremeña por 6-1 y 6-0.
Chingotto y Galán siguen con su luna de miel eterna. Desde que se juntaron no se han bajado de las finales. En Roma volvieron a ganar a los número uno, Agustín Tapia y Arturo Coello, que aunque forzaron el tercer set siempre fueron a rebufo. Ale Galán es sin discusión el mejor jugador del circuito en la actualidad. Ocupa mucha pista, comete pocos errores y es definitivo en cuanto tiene la ocasión. Chingotto es su complemento perfecto, un metrónomo que trabaja y trabaja y juega para su compañero como en baloncesto John Stockton lo hacía para Karl Malone.
😞 La decepción: la relación entre Paquito y Lebrón
Paquito Navarro y Juan Lebrón cayeron en semifinales contra Tapia y Coello. Deportivamente un resultado normal, lo que no lo es tanto es su relación aparentemente tóxica. Los dos andaluces, que según dijo Paquito en Radio Marca antes se decían cosas mucho peores y son como dos hermanos, entraron en barrena cuando habían empezado a gran nivel.
Empezaron las discusiones, malas caras, no se dirigían la palabra ni chocaban las manos… y los rivales les mandaron a casa en un abrir y cerrar de ojos tras un parcial de 8-1. Como se dice en el argot padelero, se fueron del partido. Su entrenador Rodrigo Ovide no sabe como manejar esos dos temperamentos volcánicos y, sobre todo, esos dos gigantescos egos.
😲 La revelación: Patty Llaguno y Lucía Sainz
Llamar revelación a dos exnúmero uno de 39 años como Patty Llaguno y Lucía Sainz parece paradójico, pero consiguieron vencer a sus bestias negras, Gemma Triay y Claudia Fernández, la pareja que venía de ganar el torneo anterior y estaba en gran forma. El triunfo de la constancia, la perseverancia y nunca dejar de creer en el trabajo diario. Y de no perder la ilusión. Eso sí, a la final llegaron con la luz de la reserva encendida.
➕ Los extras: la asociación de entrenadores y el baile de parejas
La semana estuvo cargada de hechos relevantes. Los entrenadores presentaron su asociación profesional con el objetivo de «colaborar con FIP y con Premier Padel para desarrollar el deporte». Sus 80 miembros son un concentrado de sabiduría padelística, y la noticia, un paso más en la profesionalización del pádel.
En el circuito femenino se dio un nuevo baile de parejas. Martita Ortega rompió con Vero Virseda y volverá a jugar con la portuguesa Sofía Araújo a la que en su día dejó para jugar con Gemma Triay. Esto provocó un efecto dominó. En la parte media también se anunciaron muchos cambios, como la apuesta de Carolina Navarro, leyenda del deporte, por la joven zurda catalana Laia Rodríguez.
Virseda, por su parte, jugará con Alejandra Salazar, en principio de forma provisional, pues la compañera de esta, Tamara Icardo, está recuperándose de una lesión muscular.
Tras una semana de descanso, el circuito continuará en Génova. Inicialmente parecía que el torneo iba a estar descafeinado porque los jugadores amenazaron con no presentarse, exigiendo a Premier Padel mejoras. Pero el circuito reaccionó y les presentó una remodelación en su cúpula que permitió que desconvocaran la huelga y así ganar tiempo.