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Los Glazer quieren más por el Manchester United

Pocos días más tarde de que los dueños del Liverpool lanzaran humo sobre la posible venta del club, y apenas horas después de que el Manchester United ganara la Carabao Cup, parece que los propietarios de este último club, la controvertida familia Glazer, han rechazado las dos únicas ofertas serias de compra que se les habían presentado.

Aunque se había hablado últimamente de cuatro, todo hace pensar que, al final, solo Jim Ratcliffe, el multimillonario inglés y mayor accionista de Ineos, una de las mayores compañías químicas del mundo, y el jeque catarí Jassim bin Hamad Al Thani habían presentado propuestas firmes.

Sin embargo, medios británicos aseguran que ninguna de las dos es del gusto de los Glazer. Y probablemente, no por poca diferencia. Se dice que tanto Ratcliffe como Al Thani habrían planteado cifras superiores, pero no muy lejanas, al valor actual de mercado del club, que ronda los 3.750 millones de libras.

No puede considerarse que su criterio sea poco razonable. Y no solo porque ese sea el valor real de mercado del club en la actualidad, sino porque la empresa que lo adquiera tendrá forzosamente que abordar la renovación completa del estadio de Old Trafford (¿o construir uno nuevo?) y hacer un nuevo campo de entrenamiento. En total, unos 2.000 millones de libras.

Súmese a lo anterior que Al Thani se había comprometido a asumir la deuda del club, que asciende a casi 700 millones de libras. Y que muy probablemente el entrenador, Erik Ten Hag, querría más fichajes próximamente…

Nada de todo esto parece conmover en exceso a los Glazer, que esperan ofertas situadas en el entorno de los 5.000 millones de libras.

Tanto Ratcliffe como Al Thani están ahora la espera de una respuesta formal de Raine Group, que es la entidad que se ocupa de la operación. Al igual que lo estarán JPMorgan y Goldman Sachs, los bancos de inversión contratados por Ratcliffe para llevar a buen puerto la operación.

En todo caso, el mayor problema de fondo podría estar en que, a la hora de la verdad, no se sabe a ciencia cierta qué quieren los Glazer.

Hay quienes aseguran que no desean desprenderse del club, sino solo de una parte minoritaria de su capital (lo que no gustaría a Al Thani, que quiere todo o nada). Y tampoco faltan los que sugieren que no todos los miembros de la familia están de acuerdo sobre qué tipo de operación deberían abordar.

Sea como fuere, todo ello no hace más que alimentar el odio nada soterrado que los seguidores de los red devils manifiestan un día sí y otro también contra los indeseados propietarios. Y que, según pasan las horas, resulta cada vez más comprensible…

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