Todos hemos sido alguna vez el plan B de alguien y hemos utilizado a otros como segundo plato. Evidentemente, hay situaciones y situaciones para hacerlo, pero tener alternativas a las que recurrir cuando te falla la idea prioritaria es lo más normal del mundo. Es, incluso, una virtud planificar distintas opciones para que, llegado el momento de decidir, haya un mayor margen de maniobra. En eso, el Arsenal lo ha bordado este invierno, cuando le fallaron los fichajes de Mykhaylo Mudryk y Moisés Caicedo: supo encontrar a dos futbolistas que le diesen un rendimiento inmediato, como Trossard y Jorginho.
🤫 Como para que el Arsenal se enfade con el Brighton
Es cierto que Moisés Caicedo llegó a presionar a los seagulls para conseguir salir de la costa sur de Inglaterra rumbo a tierras gunners. Sin éxito, porque el Brighton no dejó marchar a uno de sus pilares… pero sí lo hizo con Leandro Trossard. El belga era el máximo goleador y mayor generador de ocasiones del equipo dirigido primero por Graham Potter y después por Roberto De Zerbi. Polivalente como él solo, además, en un lugar donde esa versatilidad posicional es una de las virtudes más valoradas: extremo, mediapunta, falso ‘9’, interior o carrilero.
¿Qué podía salir mal? Poca cosa, porque su precio apenas fue de 24 millones de euros, una oportunidad de mercado formidable: un comodín táctico, en el mejor momento de su carrera, conocedor de la Premier League y capaz de liderar ataques. Dicho y hecho: el belga encajó como un joker en la baraja americana.
Mayoritariamente, Trossard es extremo izquierdo para Arteta, compite por un puesto con Martinelli. Válido también para el resto del frente de ataque y la zona de tres cuartos, gracias a su visión de juego, habilidad para conducir con el esférico cosido a la bota, agilidad corporal, recursos técnicos en espacios reducidos y manejo de ambas piernas.
En Anfield marcó un hat-trick con la menos dominante, la zurda. O eso dice… Con un extra que le hace elevar sus cifras: la calidad de golpeo, sea para centrar o disparar a puerta, así como para armarlo.
⏱️ Un metrónomo contra el cronómetro
No vamos a descubrir a estas alturas la calidad de Jorginho, pero sí lo bien que le sienta su presencia a un Arsenal que ya cuenta las jornadas para convertirse en campeón de la Premier League. La ansiedad crece a medida que pasan las jornadas, así como las piernas y la pelota pesan más por un tema físico y de responsabilidad.
Ante eso, el centrocampista italiano está curado de espanto: tiene un poso competitivo diferente al del resto de la plantilla, también respecto al propio Moisés Caicedo, que apenas rompió su cascarón hace un año. La sabiduría de Jorginho y la lectura de los tiempos representan un plus. Clave, además, por los partidos que se ha perdido un Thomas demasiado propenso a las lesiones.
👊 Victorious at Villa
Relive all the highlights from our 4-2 win in Birmingham earlier this afternoon 👇 pic.twitter.com/5FO6Pmh5de
— Arsenal (@Arsenal) February 18, 2023
Rendimiento inmediato que, para más inri, dio puntos este último mes con un golpeo lejano afortunado, que tocó la espalda de Emi Martínez para terminar de culminar en el descuento otra remontada más para el Arsenal. La cuarta de las cinco que ha completado el equipo de Arteta. Jorginho puede cambiar partidos desde su pase incisivo, hasta la capacidad para retener el balón y organizar a los suyos. Tal vez a largo plazo se eche de menos al ecuatoriano, pero, por ahora, han firmado a la persona adecuada, por un módico precio de unos 15 millones, para orquestar el sueño del norte de Londres.
