El paso de Marcelo Vieira por la Superliga griega no pasará a los anales de la historia por su rendimiento, sino por sumarse a la lista de los veteranos que llegaron a El Pireo y solo sonaron por lo que pasó fuera de los focos del verde. Apenas cuatro meses y medio después, tras marcar tres goles con la elástica de Olympiacos, deja el cuadro heleno para regresar a Brasil, de la mano del Fluminense que le vio nacer, futbolísticamente hablando.
𝐖𝐞𝐥𝐜𝐨𝐦𝐞 𝐡𝐨𝐦𝐞 • 𝐁𝐢𝐞𝐧𝐯𝐞𝐧𝐢𝐝𝐨 𝐚 𝐬𝐮 𝐜𝐚𝐬𝐚 • 𝐁𝐞𝐦-𝐯𝐢𝐧𝐝𝐨 𝐚 𝐬𝐮𝐚 𝐜𝐚𝐬𝐚#WhereImFrom #MlkDeXerém #M12NoFlu pic.twitter.com/iUhWEua4N5
— Fluminense F.C. (@FluminenseFC) February 24, 2023
🏡 De vuelta a casa en Fluminense
Marcelo jugará en el equipo en el que dio sus primeros pasos como futbolista hasta 2006, cuando dejó tirado a Thiago Silva en la defensa de Fluminense para emigrar a España y enfundarse la casaca del Real Madrid. Durante ese tiempo, más de 15 años, jugador y club han cambiado mucho: Marcelo fue durante varias temporadas el mejor lateral izquierdo ofensivo de Europa y un líder de vestuario sin igual, protagonista en cinco Champions con el Real Madrid.
Por su parte, ‘Flu’ rozó la corona de campeón de Sudamérica en 2008, cuando Liga de Quito de Ecuador le privó en la final continental de ese privilegio sin precedentes para ‘El Tricolor’. También estuvo varios cursos lejos de la cabeza de la Serie A brasileña, aunque fue campeón en 2010 y 2012, dos de las cuatro ligas que ha ganado a lo largo de su historia. Los últimos años han sido más benevolentes con Fluminense, que con Marcão y ahora con Fernando Diniz como estrategas, logró la clasificación a la Copa Libertadores en tres ocasiones consecutivas.
En su vuelta a Río de Janeiro, Marcelo coincidirá con dos laterales de nivel: Lucas Calegari, promesa de la ‘Canarinha’ en el perfil diestro a sus 20 años, y con un Cristiano da Silva que fue uno de los artífices del triunfo del Sheriff Tirsspol hace un año y medio en el Bernabéu. No le pondrán las cosas fáciles al excapitán del Real Madrid. Tal vez, esto incite a Diniz a alinearlo como centrocampista, en una reconversión a lo Dani Alves. Además, compartirá el que parece que será su último vestuario con otros dos míticos del fútbol brasileño, como Felipe Melo (a sus 39 años) y Paulo Henrique Ganso (33), una década después de ser la mano derecha de Neymar en aquel Santos tan entrañable.
🤔💭 Marcelo, un histórico más en el Brasileirão
En un momento económico boyante dentro de Sudamérica, la primera división brasileña actualmente acapara talento a raudales. No solo jóvenes promesas y veteranos, aunque estos últimos todavía son un pilar fundamental de su fútbol. Sin ir más lejos, Luis Suárez (33), otro mito de la liga española, comanda el ataque de Grêmio, con Lucas Leiva (33) como regista.
En el Flamengo, actual campeón de la Copa Libertadores, lucen tres veteranos de guerra como David Luiz (35), Arturo Vidal, (35) y Filipe Luiz (37).
En el Atlético Mineiro, Hulk (36) y Eduardo Vargas (33) ponen la voz de la experiencia. Fernandinho (37) hace lo propio en Athletico Paranaense, subcampeón continental; mientras que Rafinha (37), el antiguo lateral del Bayern, lo replica en São Paulo. La guinda del pastel es para Nenê, ex del Alavés, Mallorca Celta y Espanyol, entre otros, que a los 41 años aún viste los colores de Vasco da Gama.
