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🚴​ Ciclismo 'Finisher'

El Tour de Francia 2023, en 4 claves: así se gestó el triunfo de Vingegaard

El Tour de Francia 2023 ha llegado a su fin. Jonas Vingegaard entró triunfal y enfundado en el maillot amarillo en los Campos Elíseos por segundo año consecutivo e igualó a Tadej Pogacar con dos entorchados en su haber. El danés regaló a los aficionados una histórica y épica contrarreloj donde sentenció ‘Le grand boucle’, además de mostrarse sólido como una roca durante toda la carrera.

Tadej Pogacar sufrió durante la última semana. Se le vio agotado, sin fuerzas y dejó una frase para la historia en el debut de las radios en el Tour: «Se acabó, estoy muerto», suspiró el esloveno en la ascensión a la Col de la Loze. Su accidentada preparación, una caída y el esfuerzo inhumano durante la contrarreloj le alejaron de la pelea por el maillot amarillo. En medio de la álucinante lucha entre el danés y el esloveno, llegó el resurgir del ciclismo español. Tres victorias de etapa, un increíble Pello Bilbao y la presentación internacional de Carlos Rodríguez, la mayor esperanza española para el futuro.

⚔️ 1. Lucha encarnizada en las primeras semanas

El UAE Team Emirates de Tadej Pogacar y el Jumbo Visma de Jonas Vingegaard no esperaron ni medio segundo para acaparar todo el protagonismo del Tour de Francia. Desde el inicio hasta el final, ambos equipos asumieron los galones que sus millonarios presupuestos y sus alineaciones plagadas de estrellas requerían. De hecho, Adam Yates (UAE) fue el primer maillot amarillo de la carrera en España. Las escarpadas carreteras de Bilbao finalizaron con un duelo entre los hermanos Yates, con Simon cediendo el triunfo a su hermano.

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Jonas Vingegaard y Tadej Pogacar, durante el Tour de Francia.

Pogacar comenzó explosivo y entró tercero en las dos primeras etapas en Bilbao y Donosti. Tras las exhibiciones al sprint de Jasper Philipsen, a la postre ganador del maillot verde, el australiano Jai Hindley sorprendió a todos y se enfundó el amarillo en la quinta etapa. Poco le iba a durar el premio, ya que Pogacar y Vingegaard querían todos los focos para ellos.

Ambos están a años luz del resto en cuanto momento de forma en la actualidad. Ya se habían dejado ver en los cinco primeros días con ese perfil de media montaña en las etapas y en la sexta, primer final en alto de todo el Tour, demostraron que nadie les puede toser a día de hoy. Pogacar se hizo con la victoria parcial, mientras que Vingegaard, con su mentalidad de hormiga, capturó el maillot amarillo y gestionó su ventaja frente al esloveno. El danés ya era líder en el sexto día y no lo volvería a soltar jamás.

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Michal Kwiatkowski, tras ganar en el Grand Colombier.

Desde entonces, apoyados en sus megaescuadras, adoptaron una actitud de vigilancia. Pogacar dejó algunas arrancadas impresionantes al alcance de muy pocos ciclistas en la historia y una exhibición de poderío sobrehumano en la montaña. El mejor ejemplo estuvo en el Grand Colombier. La mítica ascensión llegó en la decimotercera etapa de ‘Le grand boucle’ que ganó el polaco Michal Kwiatkowski. Tras ‘Kwiato’, Pogacar soltó a Vingegaard con unas piernas motorizadas, aunque el danés poco a poco le recuperó la distancia.

⏱️ 2. Una contrarreloj para la historia

Llegó la tercera semana del Tour de Francia 2023 con una igualdad sin precedentes. Tan solo 10 segundos separaban a Vingegaard de Pogacar y la única contrarreloj de la carrera hacía acto de presencia. Una cronoescalada de 22 kilómetros con un pequeño puerto de segunda. Wout van Aert, uno de los mejores escuderos de Vingegaard en Jumbo Visma, realizó una tremenda crono y se colocó inalcanzable para los terrestres, pero Jonas y Tadej son de otro mundo.

Pogacar consiguió superar a Van Aert por más de un minuto, una auténtica barbaridad en una crono del estilo, aunque no fue comparable a lo que hizo Jonas Vingegaard. El danés casi entró junto a al esloveno y trituró el crono. Añadió más de minuto y medio (1′ 38″) a la distancia entre ambos y sentenció el Tour. Cuando bajó de la bicicleta, el propio Jonas quedó alucinado con los vatios que había movido en carrera, prácticamente destruyó la carretera a pedaladas. Una de las mayores exhibiciones de la historia del Tour de Francia, desde Miguel Induráin que no se veía algo similar.

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📻 3. «Se acabó, estoy muerto»

Tras el repaso en la contrarreloj, Pogacar debía recortar casi dos minutos al danés. Quedaba la etapa reina. El pelotón debía subir más de 5.000 metros de desnivel en dos puertos de primera, otro de segunda y un hors catégorie. En la subida a la Col de la Loze Pogacar se quedó. No podía más. El esloveno pronunció entonces palabras que se inscribieron de forma instantánea en los libros del Tour: «I’m gone, I’m dead«.

A Tadej le pasaron factura muchas cosas: su accidentada preparación, el exceso de clásicas, su caída al principio de la etapa y la dura contrarreloj. A pesar de ello, honores para el esloveno que se dejó casi seis minutos en la ascensión. Un ciclista como pocos y de los que ya no quedan que apenas tiene 23 años. Vingegaard por su parte demostró estar intratable y arrancó para sentenciar la carrera. Nadie le pudo parar y se quedó a nada de ganar la etapa. Tras su hundimiento, Pogacar prometió ganar la penúltima etapa en la montaña, hito que consiguió unos días más tarde y con lo que cerró su segundo puesto a 7 minutos y 29 segundos de Vingegaard.

🇪🇸 4. El ciclismo español regresa al Tour

El Tour de Francia 2023 siempre será recordado por ser el segundo título de Jonas Vingegaard, pero desde la perspectiva española quedará como el regreso del ciclismo nacional por la puerta grande. Desde 2018, con Omar Fraile, un español no había podido ganar una etapa en ‘Le grand boucle‘. Pello Bilbao, que dejó una carrera espectacular, fue el afortunado en romper la mala racha. La décima jornada se la llevó el vasco de 33 años que se impuso en la fuga y se metió en la pelea por el podio.

Pello quedó además cuarto en la contrarreloj para firmar un Tour sobresaliente en el que finalizó sexto. Ion Izagirre se unió a su paisano dos días más tarde y el granadino Carlos Rodríguez rubricó la semana española después de capturar la decimocuarta etapa. El de Almuñecar tuvo uno de los debuts más impresionantes de siempre para un ciclista nacional. A sus 22 años tumbó a Vingegaard y Pogacar para sumar su primera victoria en la ronda gala y finalizó quinto en la general a escasos 2 minutos del podio. Se esperan cosas gigantes de Carlos Rodríguez para el futuro y gracias a él España sueña con poder portar de nuevo el amarillo.

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