Eslovenia apenas cuenta con dos millones de habitantes y es el decimoquinto país con menor cantidad de población de las 55 federaciones que conforman la UEFA. Sin embargo, el deporte allí es mucho más que un pasatiempos. A la vista están los ejemplos de la selección de baloncesto que lidera Luka Dončić, la de fútbol capitaneada por Jan Oblak, o el caso de Tadej Pogačar en el mundo del ciclismo. Lo que pasa más desapercibido, pero crece también de forma exponencial, es la presencia de cada vez más árbitros de prestigio en los partidos europeos. Quizá, impulsados por Alexander Ceferin, otro esloveno ilustre, que ejerce como presidente de la Unión de Asociaciones Europeas de Fútbol desde 2011.
🇸🇮 Los árbitros de Eslovenia, en auge
Realmente, la frase aplica para el fútbol esloveno en general, país cuya selección nacional se acaba de clasificar para la segunda Eurocopa de su historia. Lo llamativo en términos arbitrales es que Eslovenia esté entre las seis naciones más representadas de la Champions League. Los culpables son Slavko Vinčić, colegiado de 44 años y 17 temporadas como profesional, y Rade Obrenović, con 33 años y una década a sus espaldas en la élite. El primero ha dirigido cuatro partidos el presente curso y Obrenović, dos duelos de la máxima competición continental de clubes, además de otros dos perteneciente a la Europa League.
Por si fuera poco, otros dos colegiados más se unen a la lista para hacer que Eslovenia esté representada también en Europa y Conference League: Matej Jug, de 43 años, profesional desde 2004; y David Smajc, con 35 años y seis cursos de experiencia el máximo nivel. Matej, con tres partidos de Europa League y dos de Conference League; y Smajc solo con dos de la tercera competición de clubes más importante de Europa. Grandes números para ser un país tan pequeño en términos de población.
🧑⚖️ Vinčić, bajo el legado de Skomina
Más allá de lo cuantitativo, Eslovenia lleva años produciendo árbitros de mucho cartel en el Viejo Continente. El más conocido de todos es Damir Skomina, con experiencia en Eurocopas y Mundiales, además de haber pitado la final de la Champions de 2019 entre Tottenham y Liverpool, y la Europa League de 2017, que enfrentaba a Ajax y Manchester United. Skomina se retiró en 2021, a sus 45 años, tras sus incesantes problemas de rodilla, aunque declaró que seguiría vinculado al fútbol. Y así lo hizo, en los despachos del MNK Izola, perteneciente a la tercera división del país.
Su figura parece difícil de alcanzar para los actuales colegiados eslovenos, aunque Slavko Vinčić se ha acercado bastante, a la vez que salían a la luz varios asuntos turbios en torno a su persona. Concretamente, durante el inicio de la pandemia, cuando fue detenido por su supuesta vinculación con una red internacional de prostitución, narcotráfico y tráfico de armas, además de romper el protocolo de la COVID-19 cuando fue detenido en una redada en Bosnia-Herzegovina. Vinčić era una de las 35 personas que fueron sorprendidas en un domicilio particular, en el que encontraron 10.000 euros de dudosa procedencia, armas y cocaína.
Aquello pudo suponer el final de la carrera del segundo árbitro esloveno de renombre, pero nada más lejos de la realidad. Libre de cargos, Slavko Vinčić continuó como uno de los colegiados mejor valorados del panorama mundial, también arbitró en eliminatorias para la Eurocopa disputada en 2021 y debutó en una Copa del Mundo al pitar el histórico Arabia Saudí vs. Argentina de 2022. No todo fueron buenos momentos para él, ya que también dirigió el polémico Barça vs. Inter de 2023, que se saldó con la eliminación de los culés de la Champions League. La carrera de este controvertido juez de campo parece estar también cerca de su fin, aunque el futuro de los eslovenos está a buen recaudo.