Parece que ha pasado una eternidad, pero Ange Postecoglou solo ha pasado una temporada en el norte de Londres. El excelso rendimiento de su equipo durante la campaña pasada le ha permitido afrontar su segundo año con confianza en el proceso. Saben que por este camino llegarán lejos. La cosa está en que el fútbol no tiene tanta paciencia. Los cuatro puntos que llevan han hecho que salten las alarmas. ¿Realmente hay que exigirles desde ya al joven proyecto de los Spurs o tienen aún margen de error?
¿Puede convertirse el ‘Cuti’ Romero en el más amonestado de la historia?
🏠 Con los cimientos de algo grande para el Tottenham
El Tottenham es el segundo equipo con la edad media más baja de todo el Big-6 (25,28 años). Solo el Chelsea, dentro de su supernova despilfarradora, les supera. Meritorio si tenemos en cuenta todo lo que fichan, pero no tanto si hablamos de la competitividad. Porque sí, los Spurs de Postecoglou ya pueden tratar a cualquiera de tú a tú. Durante la campaña pasada alcanzaron el liderato durante algunas jornadas y se postularon a ser los favoritos claros a conseguir la clasificación a la Champions League. Se acabaron desinflando, pero el mensaje ya estaba mandado.
Desde su llegada, el técnico ha dado prioridad a futbolistas como Pape Matar Sarr, Yves Bissouma y Destiny Udogie, quienes se consolidaron como piezas clave en el once titular. Si el presente es bueno, el futuro será aún mejor por los jugadores que tiene el Tottenham y el estilo de juego que practican. Postecoglou siempre ha buscado un fútbol de posesión, con presión alta y ataques rápidos. Este enfoque, radicalmente opuesto a lo que se vio en los últimos años en su zona del norte de Londres, ha encandilado a su afición. Es una mezcla perfecta entre el optimismo que provoca lo nuevo y la seguridad que genera el saber que realmente funciona. Así, mirando hacia el futuro, cualquiera es capaz de olvidar a Harry Kane.
El Tottenham de Postecoglou encuentra vida lejos de Harry Kane
🔜 Los equipos de Postecoglou ya compitieron por títulos
Para entender mejor el proyecto joven de Postecoglou en Tottenham, es útil observar su paso por el Celtic de Glasgow, donde dejó una marca imborrable. Al llegar al Celtic en 2021, Postecoglou se encontró con un club que había perdido parte de su dominio del fútbol escocés. En su primera temporada, el australiano implementó su filosofía de fútbol ofensivo y dio oportunidades a talentos noveles como Liel Abada y Jota, mientras que integraba a otros jugadores clave como Kyogo Furuhashi, a quien había fichado del fútbol japonés, mercado que conocía bien.
El resultado fue impresionante: Postecoglou llevó al Celtic a ganar dos títulos de liga consecutivos (2021-2022 y 2022-2023), además de varios trofeos domésticos, incluido el doblete de liga y copa en la temporada 2022-2023. Bajo su mando, el Celtic no solo recuperó su hegemonía en Escocia, sino que también jugó un fútbol vibrante y ofensivo, acumulando puntos con récords y logrando victorias clave en el Old Firm. Estos éxitos reforzaron la reputación del técnico, y fueron su trampolín para dar el salto hacia la Premier League. Si se le deja trabajar, él responde en contextos de máxima exigencia. Y es que, por mucho que en Glasgow no tenga el talento de este Tottenham, la necesidad de ganar del Celtic es la de cualquier grande. Postecoglou ha demostrado que le sobra personalidad para afrontar con éxito retos así.

Pese a que no han empezado bien la temporada, en el Tottenham creen en el proceso.
Por ello, surge una pequeña disonancia que se materializa en una pregunta incómoda. ¿Está este Tottenham preparado para ganar títulos? Pues, como todo, depende. Sin embargo, la respuesta corta es que no. Al menos por el momento. Están en proceso de cambiar su suerte. Todos los fichajes que hicieron este verano apuntan en esa dirección. La directiva, tras tantos años a la deriva, ha decidido dejar de lado el éxito inmediato para construir con paciencia. Van a dejar trabajar a Postecoglou. Saben que no pueden exigirle resultados inmediatos a un hombre que trabaja en el largo plazo y que perdió a Harry Kane nada más poner un pie en Londres. Les toca esperar, y lo van a hacer con gusto: hace tiempo que el Tottenham no ilusionaba tanto.
La diferencia entre lo que quieren ser y lo que serán es cuestión de tiempo. Son un equipo jovencísimo y con un potencial tremendo. Tienen a varios jugadores que pueden acabar siendo superestrellas. Los títulos ya llegarán en lo que crecen. Solo el paso de los partidos les separa del fin de su sequía de trofeos. Este Tottenham de Postecoglou lo puede conseguir. Da lástima que sea sin Kane, pero madurar también es decir adiós. El cambio es crecimiento, al fin y al cabo, y en ello está este Tottenham.