⚽ Fútbol internacional

Sensaciones encontradas en el fin de la ‘era Conte’ en el Tottenham

Lo que era un secreto a voces ya se ha convertido en oficial. Antonio Conte deja de ser entrenador del Tottenham, después de que el italiano y el club inglés alcanzasen un acuerdo para separar sus caminos. Hora de hacer balance sobre otra etapa corta, pero intensa en su currículum. Su sucesor será Cristian Stellini, su mano derecha desde que coincidieron en el Siena hace trece años.

🔢 Números por debajo del resto de su carrera

Durante los 16 meses que Antonio Conte ha comandado a los spurs, ha quedado claro cuál es su especialidad y cuáles son sus mayores déficits. Crónica de una muerte anunciada, la relación entre uno de los técnicos más cortoplacistas y exigentes del mundo, con un equipo en el que, precisamente, ganar nunca fue condición sine qua non de éxito. Lo que para muchos es un oasis de paz, para el carácter tan fuerte de Conte, se quedó corto en términos de ambición. Al final, la convivencia entre el gallo y los lirios blancos fue menos fructífera de lo que cabría esperar.

O, mejor dicho, poco duradera, y eso que Conte nunca ha dirigido más de 106 partidos a ningún equipo. De hecho, estos 76 encuentros con la entidad londinense representan el cuarto ciclo más largo de su carrera, por detrás de los de Juventus (86), Inter (102) y Chelsea (106). Con todos ellos ganó el campeonato doméstico de la regularidad, pero no fue suficiente. En el momento que Conte ve un proyecto estancado, prefiere desvincularse de él. Por su última rueda de prensa, eso es lo que le ha llevado a forzar su salida del Tottenham.


Tomando como referencia los cuatro proyectos más duraderos de Conte, el del Tottenham ha sido el que peor media de puntos por partido ha obtenido: 1.78, lejos de los registros de Inter (2.11), Chelsea (2.12) y Juventus (2.28).


🧑‍🏫 Conte vuelve a ser identidad, sin reinvención

Como de costumbre, fue de menos a más. Cuando la exigencia no era tan alta, al comienzo, superó las expectativas. Y, cuando más recursos tuvo a su disposición para asentarse en el top 4, más ha dejado a deber. Aunque, seguramente, el estilo de juego le haya jugado en contra: su Tottenham fue bastante poco vistoso.

Más especulativo que el Inter y bastante menos incómodo para los rivales por su pasividad defensiva. Con el contraataque por bandera, fue capaz de hacer sufrir como pocos a Liverpool o Manchester City. Empató dos de tres contra los de Klopp y le ganó otros dos de tres a Guardiola.

Hojbjerg Conte

En contextos reactivos y ante equipos que asumieran el riesgo de presionar alto, Conte siempre fue un dolor de cabeza mayúsculo en este Tottenham. Salidas de balón, en corto o en largo, fugaces, capaces de desarticular bloques altos trabajados e intensos. De ahí que con Harry Kane forjase una sociedad espléndida.

Harry Kane: el llanero solitario del Tottenham

El problema vino cuando no pudo jugar con el estímulo del rival; quienes le cedieron la iniciativa y esperaron más atrás, evidenciaron las costuras de un equipo poco dañino en ese escenario. El plan A, fascinante. El plan B, deficiente. Y, de camino, el dibujo no lo movió ni para sentar a sus jugadores en el autobús.

⚖️ Balance de resultados

En total, son 41 triunfos, 12 empates y 23 derrotas. Sin embargo, la gran diferencia está en el rendimiento en liga y en torneos cortos. Mucho mejor en lo primero que en lo segundo, por la mayor impunidad a los accidentes en la competición de la regularidad respecto a las eliminatorias. En Champions, Antonio volvió a caer ante de lo que cabría esperar. Su techo copero está en las semifinales de la Carabao Cup 2021/2022, cuando fue eliminado a manos del Chelsea. Middlesbrough o Sheffield United protagonizaron dos de los capítulos más oscuros de la era Conte, equipos de segunda división que le apearon del 50% de las copas que jugó.

Antonio Conte: pizarra de culto, alergia a la Champions

Por contra, en Premier League cogió a un equipo que era noveno clasificado en la jornada 11 y logró la clasificación a Champions el pasado curso, en cuarta posición. El mismo lugar en el que deja al club ahora; porque, aunque el balance de puntos no sea tan alto como en otros equipos a los que ha dirigido, la competitividad de la actual Premier League también es el contexto más salvaje que se ha encontrado en su carrera. Y, probablemente, esta no haya sido la mejor plantilla que ha tenido.

Así se cierra otro capítulo en las convulsas memorias de Antonio Conte. Un tipo peculiar. El mejor en lo bueno y el peor en lo malo.

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