England - Germany
⚽ Mundial Catar 2022

Alemania, ¿decepción o accidente?

En verano, invierno, primavera u otoño, la Copa del Mundo de fútbol tiene algo inexplicable. Como que la selección más constante, junto a Brasil, en la historia de la competición, haya vuelto a quedarse fuera de la ronda de octavos de final contra todo pronóstico, como ya sucediera en 2018. Pero… ¿la eliminación de Alemania es un accidente o un batacazo? Probablemente, tenga un poco de las dos, porque, si bien hizo méritos en un deporte que no siempre los premia, vuelve a hundirse en unas arenas movedizas, también conocidas como «fases de grupos».

😵‍💫🤷‍♂️ De la fiabilidad a las arenas movedizas

Desde la creación de los Mundiales, con sus cambios de formato por el camino, ‘La Mannschaft’ solo se había quedado fuera en una primera ronda en la edición de 1938. Un décimo lugar que, hasta 2018, era su peor resultado en la historia. Sin embargo, de un tiempo a esta parte, Alemania ha caído en un atasco insospechado, a la vez que preocupante. En la cita de Rusia, con un grupo asequible, coincidiendo con México, Suecia y Corea del Sur. En la última Eurocopa, incluso, estuvo eliminada como última de grupo hasta que un gol de Goretzka contra Hungría en el minuto 84, le dio la clasificación.

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Fuente: Wikipedia

🤔 ¿Ha jugado mal o ha competido mal?

Probablemente, haya sido más lo segundo que lo primero. El fútbol es un deporte de acierto y Alemania ha acertado poco de cara a puerta. Su dominio, sin embargo, ha estado vigente en tramos prolongados de sus tres partidos. En contextos donde tuvo que asumir la iniciativa contra Costa Rica y Japón, o desde un plan de presión alta que ahogó la salida de balón de España, el principal debe de Luis Enrique. Llegó, incluso, a desnaturalizar por completo durante largos periodos a las dos selecciones de su grupo que acabaron accediendo a octavos de final.

👎 Las áreas fueron su condena

A Hansi Flick tal vez le haya pasado factura el hecho de jugar partidos más abiertos de lo que demandaba su línea más frágil, la defensiva. Un rasgo distintivo de su Bayern, que, sin embargo, le alcanzó para ganar una Champions en mitad del intercambio de golpes. Para colmo, Manuel Neuer es otro de los que no ha estado a la altura. Y, de la misma forma, ha sido un equipo lastrado en su eficacia, al no poder contar con un delantero centro rematador de los que ha tenido en otra época y que no ha encontrado desde la retirada de Klose. La baja de Timo Werner, sin ser esa figura, ha condicionado parte de un ataque que ha visto debutar, en una fase final de un Mundial, a Niclas Füllkrug y Youssoufa Moukoko.


Alemania ha sido la selección que, de acuerdo a las estadísticas de goles esperados (10 xG), más goles debería haber marcado en el Mundial.


👍 No todo ha sido malo

El rendimiento individual de la tetracampeona del mundo ha sido superior a lo que pudiera parecer. Destaca la figura de un David Raum muy potenciado por la asimetría de Flick, aunque haya ido de más a menos; también el caso a la inversa, de menos a más, de Serge Gnabry, el papel fundamental de Rüdiger como elemento corrector de la defensa —con alguna foto negativa o la dupla Gündoğan y Kimmich en la distribución. El primero, sacrificado para hacer un marcaje férreo a Busquets y, el segundo, como recurso frente a Costa Rica en un lateral derecho que no ha tenido dueño, prácticamente, desde que Phillip Lahm colgase las botas.

«Este fue el peor día de mi carrera. Tengo miedo de caer en un hoyo. Te hace pensar que estos errores están conectados a mi persona».

Joshua Kimmich en Sport 1.

Leroy Sané como revulsivo contra España y Goretzka frente a Japón, también encontraron la forma de inclinar el campo en favor de una Alemania que no fue resolutiva. En parte, porque Thomas Müller, en su último intento por ser el máximo goleador en la historia de los Mundiales, se fue de vacío, dejando entrever que su ciclo en la selección acaba aquí.

👦🏽🌟 Musiala, consagración de un talento de época

Pero, si por algo se recordará positivamente el viaje a Catar, más allá de ser una de las selecciones que más ha alzado la voz en favor de la igualdad de derechos humanos, es por el nivel futbolístico de la perla del Bayern. Al hilo de lo que estaba siendo su temporada, Musiala ha terminado de volar por los aires su cascarón. Sus condiciones físico-técnicas, comparadas con las de Zidane por su elegancia y plasticidad, ya las vieron todos los futboleros que prestasen un mínimo de atención desde que debutase a comienzos de la 2020/2021, con Hansi Flick como mentor, precisamente.

Musiala ya había superado, en su momento, hitos como el de ser el futbolista más joven en marcar en la Bundesliga o del Bayern en Champions. Ahora, ha traducido todas esas condiciones en una realidad, hasta ser el líder creativo y espiritual de una Alemania bajo presión en toda una fase final de Copa del Mundo. Sí, con 19 años. Y con una capacidad para interpretar el fútbol entre líneas, reciba de cara o de espaldas, a la altura de los elegidos. Alemania ha perdido pronto otro Mundial, pero ha ganado, también de forma prematura, a un jugador que puede llegar a convertirse en el más importante de su historia.

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