Con el mercado de fichajes de invierno a una semana de cerrar sus puertas, repasamos la necesidad (alta, media o baja) de cada equipo de la liga española. Todo ello, dentro de un marco de escasez, en el que los equipos de primera división han gastado solo 24 millones de euros en los fichajes de Viktor Tsygankov (al Girona por 5 millones), Memphis (al Atlético de Madrid por 3 kilos), Abner Vinicius (que llegó al Betis a cambio de 7 millones), César Montes (al Espanyol, por 8) y Youba Diarra (a Cádiz por 1 millón).
En la otra cara de la moneda, sin contar operaciones de bajo coste, han ingresado un total de 35 millones de euros en Lucas Pérez (1 millón al Deportivo de la Coruña), Rulli (8 millones al Ajax), Álex Moreno (14 millones al Aston Villa), Franco Russo (1 millón al Ludogorets) y João Félix (11 millones de comisión por la cesión al Chelsea). Más el mencionado Memphis, el único traspaso interno, a cambio de un pago por hacerse con sus servicios en propiedad, que se ha realizado en la máxima categoría del fútbol español.
😌 Van servidos
Visto lo visto, por polivalencia de perfiles, profundidad de plantilla y por lo poco que contaba el delantero neerlandés para Xavi, el Barcelona no debería resentirse en el ataque, siempre y cuando no haya lesiones. No obstante, desde el Camp Nou no niegan que pueda llegar un recambio para dosificar a Robert Lewandowski.
La Real Sociedad, ahora que recupera lesionados y que se nutre como nadie de su cantera, es otra que no debería hacer mucho ruido de aquí a febrero. Por su parte, Osasuna o Girona son otros dos equipos que pasan por una situación idílica, con plantillas que incluyen varios perfiles polifuncionales y doblan cada demarcación con dos jugadores. Por fondo y forma, las mejores plantillas de su historia reciente.
🫣 Al loro a las oportunidades
El grueso de primera división no tiene necesidades primarias, pero sí importantes áreas de mejora. Especialmente, en el eje de la zaga. Es el caso del Atlético de Madrid, Betis —el lateral derecho también es mejorable— o un Sevilla al que llegó Loïc Badé, pero de donde salió José Ángel Carmona (Elche) y que aún tiene a Marcão afiliado a su enfermería. Ocampos y ‘Tecatito’, en sus respectivos retornos, sumarán desequilibrio, aunque no parecen suficientes para combatir las carencias en la punta del ataque.
El Athletic Club está en la lista de clubes que demandan otro central. Y no por ausencia de nivel, sino porque Íñigo Martínez, que termina contrato en junio, sin indicios de renovar, pinta que no forzará demasiado para reaparecer. Vivian y Yeray Álvarez necesitarán un recambio… que podría ser Aitor Paredes, salvo que el club encuentre una oportunidad de mercado, con las limitaciones agregadas que conlleva su caso por la política de solo incorporar jugadores de ascendencia vasca o navarra.
En una tesitura similar se encuentran los de Vallecas. Al Rayo no le sobraría un central más, por mucho que Iraola esté más que satisfecho por cómo se ha confeccionado su plantilla. Eso sí, con un hándicap importante, ya que diez jugadores acaban contrato o cesión en junio, entre los que figuran pesos pesados como Catena, Lejeune, Comesaña, Camello o Falcao. Para que el recambio no sea tan drástico, adelantar trabajo no estaría de más.
En media-baja tabla hay varios equipos sin necesidades imperiosas, pero a los que tampoco les amargaría un dulce que dé un salto de calidad, siempre y cuando se ponga a tiro. En esta rama, se posan Mallorca, Valencia, Espanyol y Almería; además de un Celta o un Getafe que, por plantilla, no deberían sufrir en exceso por mantener la categoría, pero que tampoco harían mal en incorporar cantidad, por si acaso hay lesiones o la cosa se complica por bajos rendimientos individuales. El Valladolid, con el aterrizaje de Cyle Larin y Darwin Machís, debería remontar el vuelo por su facilidad para concretar ocasiones, que es el mayor déficit de un equipo que suma cinco jornadas sin ver puerta. Aunque sin perder de vista las oportunidades.
😨 Urge reforzar
Con Eden Hazard y Mariano como meros jugadores de relleno, en los que Ancelotti no confía desde hace tiempo, incorporar un revulsivo para el ataque se ha vuelto una necesidad. ‘Carletto’ no lo pide, en parte, porque su gestión de plantilla es una más corta de lo habitual. Pero con la poca confianza en el filial, el historial de lesiones recientes de Benzema —y Carvajal— y el estado en el que ha vuelto Modrić del Mundial, parece evidente que con Rodrygo y Valverde no alcanzará para cubrir todas las necesidades. Por muy polivalentes que sean, el calendario saturará a un vestuario que va con la lengua fuera, en la antesala del Mundial de Clubes.
El Villarreal tendrá que sacar sus hojas de scouting y, aunque sea con operaciones low cost, la inminente marcha de Danjuma o Nicolas Jackson demanda que lleguen uno o dos atacantes. Más aún si se tiene en cuenta que Gerard Moreno ha vuelto pletórico de sus lesiones, como de costumbre, pero que se ha perdido por problemas físicos más de la mitad de los partidos del ‘Submarino Amarillo’. La Conference League, en la que el Villarreal parte como uno de los máximos favoritos al título, es otro aliciente más.
Casualidad, o no, a blancos y groguets les acompañan dos equipos en descenso, que serían tres si el Valladolid no hubiese hecho ya los deberes. El Cádiz, huérfano tras la fuga de Lucas Pérez a su tierra, necesitará un goleador contrastado para paliar que su máximo artillero ya no está. Su labor era más que esa, aunque, para generar ocasiones en contextos donde no puedan vivir de los ataques directos, no les quedará otra que encomendarse al atrevimiento de Brian Ocampo o la claridad de Alcaraz.
El Elche tiene bastantes menos puntos de los que debería, básicamente, por el mal momento de Roger Martí o, sobre todo, Lucas Boyé en el frente de ataque. Podrían confiar en que esa situación cambie, porque la calidad arriba está fuera de dudas. Ahora bien, defensivamente, el Elche es un equipo que hace aguas, especialmente en la parcela de los centrales. Mínimo, dos jugadores, deben apuntalar la zaga, si es que no han tirado todavía la toalla.
