El presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, y las capitanas de la Selección Española de Fútbol Femenino, Ivana Andrés, Irene Guerrero y Esther González, han firmado en nombre de todas las jugadoras un acuerdo histórico. Este convenio establece las medidas de conciliación familiar que se aplicarán durante su estancia en el próximo Mundial de Australia y Nueva Zelanda, que se jugará entre el 20 de julio y el 20 de agosto de 2023.
Entre las medidas acordadas, se promoverá y organizará el traslado de familiares directos de las jugadoras para que las acompañen durante el campeonato. Además, se facilitará que las jugadoras con hijos menores de dos años puedan tenerlos cerca.
👏 La RFEF sigue rompiendo barreras
Este acuerdo, que ya se alcanzó el 16 de mayo pasado, se convierte en un modelo de referencia en el mundo del fútbol, ya que incorpora medidas de conciliación similares a las de otras selecciones nacionales. La RFEF ha realizado un esfuerzo adicional para proporcionar las mejores condiciones posibles a las futbolistas y encontrar soluciones óptimas para que puedan recibir el apoyo de sus seres queridos durante el campeonato.
Hay que destacar que estas medidas forman parte de la política de equiparación de condiciones entre las selecciones masculina y femenina, tal como se acordó previamente con las capitanas de la Selección antes de la última Eurocopa.
Momento de la reunión entre las capitanas de la Selección y Luis Rubiales.
En virtud de lo acordado, las jugadoras que tengan hijos menores de 2 años tendrán la posibilidad de tener a sus parejas o cuidadores y a los niños cerca durante toda la concentración en Nueva Zelanda y Australia, para poder disfrutar de un tiempo adecuado de conciliación durante los días de concentración.
Además, la RFEF se encargará de facilitar los medios para que los familiares directos de las jugadoras puedan viajar a Nueva Zelanda y Australia durante el torneo, incluyendo los días de los partidos, para que puedan compartir momentos junto a ellas.
