La Selección española cierra un parón de selecciones para el recuerdo tras golear a Chipre (6-0) en Los Cármenes. Una vez más, Nico Williams y Lamine Yamal lideraron el ataque de la España de los extremos, marcando tendencia para que en la segunda parte llegase el aluvión goleador. Así, a falta de casi un año para la Eurocopa de 2021, los de Luis De la Fuente se han ganado el derecho a soñar.
💫 La exhibición de la España de los extremos
El ambiente en Los Cármenes era tremendamente festivo para recibir a la Selección española. Quizás fuese por esa trompeta que le dio color a la retransmisión tocando el mítico ‘L’Amour Toujours‘ de Gigi D’Agostino o por las ganas de ver una victoria, pero no había dudas de que el público de Granada tenía ganas de ver a la Roja. Y, aunque el rival no fuese el de mayor entidad en el grupo de clasificación a la Eurocopa, España también quería divertirse mostrando todo su potencial. Tras su goleada en Georgia, el nuevo planteamiento de Luis De la Fuente tenía que volver a ponerse a examen. Con el peso del ataque sobre el ímpetu juvenil de los extremos y no tanto sobre el medio, deberían abrir una defensa tremendamente cerrada. Sin ser de vida o muerte, sí era un paso más hacia una Eurocopa con la que soñamos todos.
Chaparrón de goles de España en Georgia en un partido histórico
No tardó mucho en hacerse España con el control del partido. Y, por ende, Nico Williams y Lamine Yamal tampoco se demoraron en tener protagonismo. Cada contacto con la pelota obliga a Chipre a ajustar su defensa, dejando que cada regate demostrase que hace demasiado no teníamos jugadores así para la Selección. Desde su lugar, ambos pegados a la cal, evidenciaban que el gol estaba al caer. Dicho y hecho. Nico Williams, tras dos arrancadas potentísimas desde la banda, asistió en dos goles calcados. Como si fuese sencillo, desbordó, buscó el centro y encontró al rematador de segunda línea. Primero fue Gavi, y luego Mikel Merino. Y, desde la banda (esta vez fue Yamal el culpable), casi llega el tercer tanto de Morata si no fuese por su posición antirreglamentaria. La España de los extremos, con Nico y Lamine al frente, carburaba a la perfección.
Nico Williams fue un dolor de cabeza para la zaga chipriota.
🎉 Fin de fiesta en Granada
La lesión de Nico Williams fue el único lunar del partido. Se retiró con molestias, y su alcance aún es desconocido. De él, visto lo visto, depende gran parte de la candidatura a la Eurocopa. Eso sí, tampoco parece que esta Selección vaya a llorar de más una ausencia. Cuando se retiraron el del Athletic por sus dolencias y Yamal por su descanso, ese juego en banda siguió al mismo nivel. Llegaba con menos gambeta de por medio, pero con la misma efectividad. Carvajal y Ferran Torres, desde la banda derecha, demostraron que tienen bien aprendido el libreto de la España de los extremos. El lateral le regaló el tercer gol de la noche a Joselu, dejando las cosas en familia; y el culé, por su parte, marcó el cuarto tras una buena asociación con el del Real Madrid.
El público de Granada estaba rendido, y el propietario de la trompeta seguía tocando todo su libreto. Querían más. Baena, en su primer contacto con el balón en la Absoluta, le dio el quinto a la afición de Los Cármenes. Una vez más, claro, está, por una jugada que pasó por la banda. Para poner la guinda, Ferran marcó su doblete. Esta vez se volvería a alejar de la banda para poner la guinda a un gran pase de Rodri, porque, por mucho que esta sea la España de los extremos, los goles se acaban marcando por dentro. Así, con este 6-0, las revoluciones bajaron. Con ese resultado, la fiesta estaba más que montada. Y es que, por mucho que sea Chipre, esta Selección va creciendo poco a poco para presentar su candidatura a la Eurocopa. Ya sea como la España que juega por banda o la España del control, poco a poco va creciendo el grupo bajo el mandato de Luis De la Fuente. Visto lo visto, nos hemos ganado el derecho a soñar.
