⚽ Mundial Catar 2022

Marruecos, en nombre de Camerún 1990, Senegal 2002 y Ghana 2010

Por primera vez desde 2002, cuando la Corea del Sur anfitriona alcanzó las semifinales, y por tercera vez en la historia, una selección no europea o sudamericana tendrá el privilegio de disputar la penúltima instancia de un Mundial. Fue Marruecos quien se lo ganó, después de vencer a España en octavos de final y a Portugal en cuartos. Hasta esta edición, solo tres combinados nacionales africanos se habían colado en el top 8. Y todos ellos terminaron eliminados de forma agónica. Cruel, incluso. Por tanto, Marruecos no solo ha roto el techo de cristal del continente y estrenará una semifinal en nombre de África, sino que, en parte, ha vengado a la Camerún de 1990, la Senegal de 2002 y la Ghana de 2010. Historias que merecen ser recordadas.


Estados Unidos, en la primera edición de un Mundial (Uruguay 1930),  fue el otro outsider que alcanzó las semifinales de una Copa del Mundo.


🇨🇲 Camerún 1990

Los cameruneses, dirigidos por el soviético Valery Nepomnyashchy, y capitaneados por Stephen Tataw y por un Roger Milla de 38 años, alcanzaron la ronda de cuartos por primera vez en el Mundial de Italia 1990. Tal vez, por una cuestión de cronología, esta sea la más desconocida de todas, pero también la más sorprendente para muchos. Porque lejos de tener un camino asequible, en fase de grupos se encontró, nada más y nada menos, que con la Argentina campeona del Mundial de 1986, aun con Maradona o Caniggia en sus filas, con la Unión Soviética subcampeona de la Eurocopa de 1988 y con la Rumanía de Gheorghe Hagi o Popescu. Ahí es nada. Aquella Camerún dio la campanada, lideró el grupo de la muerte y superó también a la Colombia de Higuita o Valderrama en octavos.

El sueño terminó en los cuartos de final, de una forma bastante cruda, frente la Inglaterra de Gary Lineker. De hecho, este fue su mayor verdugo. La selección camerunesa estaba rompiendo todos los esquemas, por enésima vez en aquel Mundial, con su provisional victoria hasta el minuto 83. Pero el entonces delantero del Tottenham, un año después de dejar el FC Barcelona, marcó de penalti el 2-2 que mandaba el partido a la prórroga y, una vez allí, también puso desde los once metros el 2-3 final que sentenció las opciones del combinado africano. 

🇸🇳 Senegal 2002

Si bien Senegal es la actual campeona de África, la historia del fútbol continental no cuenta con el país de la costa oeste como uno de sus principales referentes. De hecho, la CAN de este 2022 es su primer gran título. Uno que sirvió, además, para que su actual seleccionador se quitase la espina clavada dos décadas después. Porque el carismático Aliou Cissé, en 2002, era uno de los líderes de aquella Senegal dirigida por Bruno Metsu, que perdió de la manera más cruel que existe.

Cayó en la prórroga, contra una Turquía donde ya asomaba un joven Nihat Kahveci, con el último gol de oro en la historia de los Mundiales. Así fue como se despidió otra de las selecciones africanas de culto, tras superar a la Suecia de Henrik Larsson, pese a su gol en ese partido de octavos. Antes, ‘Los Leones de Teranga’ habían dejado fuera en grupos a la Uruguay de Abreu, Darío Silva o Recoba; y, con un punto, a la Francia campeona del mundo en 1998, que contaba con ilustres como Henry, Petit, Trezeguet, Lizarazu, Vieira, Desailly, Barthez o Lilian Thuram en sus filas.

🇬🇭 Ghana 2010

La última proeza africana hasta este Mundial de 2022 corrió a cargo de Ghana, en la única edición que albergó el continente. Los pupilos del serbio Milovan Rajevac se plantaron en cuartos después de superar en grupos a Australia y Serbia, y de doblegar en octavos a la Estados Unidos de Clint Dempsey, Landon Donovan, Bocanegra, Howard, Altidore o Michael Bradley. En la antesala de las semifinales, ‘Las estrellas negras’ acariciaron la gloria con la yema de los dedos en Sudáfrica, no solo por caer en la tanda de penaltis, sino porque estuvieron a punto de ganarlo en el minuto 120 de la prórroga. Con Muslera ya batido, el portero de la Uruguay que fue su verdugo, Luis Suárez se inventó bajo palos la forma de sacar con la mano el gol de Dominic Adiyiah, que iba camino de ser el más importante en la historia de África.

El resto es historia. ‘Lucho’, evidentemente, se marchó expulsado… con una sonrisa de oreja a oreja, tras ver como Asamoah Gyan enviaba al travesaño el penalti que hubiera dado la gloria a Ghana en la última acción del encuentro. Minutos después, en la decisiva tanda, el entonces delantero del Stade Rennais asumió la responsabilidad de lanzar el primero. Y lo marcó, pero no pudo evitar que aquella selección comandada por Muntari, Kevin-Prince Boateng, Kwadwo Asamoah o Jonathan Mensah muriese en la orilla de unas semifinales a las que accedió la Uruguay de Forlán, Cavani o el propio Sebastián Abreu, que le dio la victoria a los charrúas con un lanzamiento de panenka.

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