La selección olímpica española de fútbol continúa con paso firme su aventura en París. Ya está más cerca de las medallas. Los pupilos de Santi Denia se impusieron a la República Dominicana (1-3) para alcanzar los cuartos de final. Primer objetivo cumplido. Como ante Uzbekistán, no fue un encuentro brillante de los españoles, pero el plantel de Santi Denia está encontrando los caminos y los goles para resolver los encuentros. El choque estuvo marcado por la expulsión del dominicano Edison Azcona antes del descanso por una absurda agresión a Pau Cubarsí. Anteriormente, Fermín había adelantado a España y Montes de Oca había puesto las tablas. La segunda parte estuvo totalmente controlada por los españoles. Sergio Gómez mandó en todo momento y se desplegó por todo el ancho del campo y la lógica se acabó imponiendo. Álex Baena perforó la portería dominicana con un disparo lejano y Miguel Gutiérrez puso la sentencia remachando un centro al segundo palo. Seis de seis para España, que se jugará el próximo martes ante Egipto el liderato del grupo.
⚽ España brilla en su efectividad
España entró al partido de nuevo con poco ritmo en la circulación del balón. El monopolio de la pelota era español, pero la República Dominicana consiguió que el encuentro no se revolucionara. Santi Denia confió en el bloque que ganó con sufrimiento a Uzbekistán y solo introdujo un cambio: el de Juanlu por Pubill, uno de los goleadores del primer encuentro. Mantuvo la pareja de centrales Eric-Cubarsí, que por momentos sufrió frente a los uzbecos. Le costó generar a España, pero encontró el camino del gol con una tenaz presión que los dominicanos no consiguieron superar. En parte, se inmolaron. Los futbolistas que dirige Ibai Gómez, exjugador del Athletic y Alavés, intentaron sacar la pelota jugada desde atrás y Fermín cazó un mal pase del portero Enrique Bosl para definir a puerta vacía.
Sin embargo, el equipo caribeño consiguió igualar el marcador antes de llegar al descanso. Con el control casi absoluto de la situación por parte de España, el balón parado fue el arma más letal de la República Dominicana. Una de cal y otra de arena. Fermín descuidó su marca en un saque de esquina y Montes de Oca puso las tablas de cabeza. La República Dominicana intentó mitigar el dominio español poniéndole tensión a todos los duelos individuales. Eso fue crispando el ambiente del choque hasta que Edison Azcona, el capitán de los caribeños, soltó una patada sin sentido desde el suelo en una falta de Cubarsí. Acabó expulsado y dejó a los suyos con un futbolista menos antes del descanso.

Momento de la patada por la que Edison Azcona se llevó la roja.
España necesitaba más vitalidad y combustión y, sobre todo, marcar otro tanto. Salieron con algo más de ritmo los de Santi Denia a la reanudación y fueron encerrando cada vez más a los dominicanos. Sin embargo, tampoco fue fácil penetrar la muralla local. Tuvo que salir al rescate Álex Baena, el otro eurocampeón del combinado olímpico. Inspirado por los disparos en largo que se vieron durante el torneo en Alemania, encontró el tiempo y el espacio suficiente para armar su pierna derecha. Joao Urbáez, en un intento de bloquear el chute, desvió lo justo para despistar a su portero. El balón acabó en la red.
El combinado español aprovechó su superioridad en el marcador y numérica para desmelenarse con transiciones rápidas y centros laterales, sobre todo a través de Aimar Oroz y Sergio Gómez. El nuevo fichaje de la Real Sociedad estuvo en todas. Partidazo el suyo. En una de estas acciones llegó el remate de Miguel Gutiérrez para poner la sentencia. Santi Denia puso todavía más refuerzos exteriores con Diego López. La República Dominicana acabó achicando agua ante el despliegue español que, viendo el resultado, también bajó una marcha para dosificar fuerzas. El próximo martes, la selección olímpica, con previsibles cambios en el equipo, jugará su último encuentro de la fase de grupos ante Egipto (15.00 horas), con el objetivo de mantener la primera plaza.






