Kawhi Leonard se ha vuelto a lesionar en la rodilla. En esta ocasión se trata de un desgarro en el menisco. El problema le ha surgido en la misma rodilla en la que se rompió el ligamento cruzado anterior durante los playoff de 2021, que le hizo perderse la pasada campaña. El californiano no consigue salir de su irrefrenable espiral de lesiones y, aunque se le espera para el curso 2023/2024, su etapa en los Clippers se puede tachar como desastrosa.
📆 Kawhi, casi inédito con los Clippers
Ver a Kawhi Leonard jugar con los Clippers es casi una odisea. En España más aún, ya que el horario de los partidos del Crypto.com Arena (4:30) suele dificultar su seguimiento. Kawhi firmó con Los Angeles Clippers en el verano de 2019. Desde entonces, han pasado cuatro cursos en los que los angelinos han disputado 328 partidos de temporada regular, de los que solo en 161 disfrutaron de la presencia de su estrella. Esto quiere decir que se ha perdido 167 choques, más de la mitad.
Tras su fichaje por los Clippers, Kawhi jamás ha jugado más de 60 partidos en una campaña; no lo hace desde 2017. Hay que tener en cuenta que Kawhi pasó la 2021/2022 en el dique seco. El contrato de Leonard con los angelinos se firmó en 2021, justo después de su lesión y se igualó en duración al de Paul George. A ‘The Claw‘ le restan dos años de contrato, el último con una opción de jugador por 48 millones de dólares.
Tanto Leonard como George han tenido problemas de lesiones en su etapa en los Clippers. Sin ir más lejos, en estos playoff donde Paul no jugó y Kawhi apenas participó en dos partidos. Ambos tienen contratos de superestrellas… pero no han dado el rendimiento, mucho menos la continuidad que una franquicia requiere de jugadores de tal calibre.
Cierto es que cuando Kawhi ha estado disponible sus números han sido incontestables. En los playoff dejó una tarjeta de 34,5 puntos, 6,5 rebotes y 6 asistencias en 40 minutos por partido, pero la realidad es que son datos irreales por su incapacidad de mantenerlos en el tiempo lo suficiente como para tener impacto real en los resultados de los Clippers.
😈 Convertido en lo que juró destruir
La explosión de Kawhi Leonard en San Antonio Spurs es una de esas historias que enamoran a los seguidores de la NBA. Similar al caso de Jimmy Butler. Un jugador de rol que termina explotando, dominando y dirigiendo un equipo a su antojo. Kawhi fue seleccionado en la decimoquinta posición del draft de 2011 por Indiana Pacers. Antes, jugó dos temporadas con los Aztecs de la Universidad de San Diego en la NCAA.
Gregg Popovich debió ver algo en él para entregar a su preciado y joven base George Hill, que despuntaba en la liga y era muy de la cuerda de ‘Pop’. Comenzó como jugador de banquillo hasta ganarse la titularidad y hacerse un hueco en una plantilla legendaria con Tim Duncan, Tony Parker y Manu Ginobili. De ser el especialista defensivo del quinteto al cielo, el crecimiento de Kawhi no se detuvo.
Spurs’ tribute video for Kawhi Leonard and Danny Green 🙏 pic.twitter.com/2Mba2aVhoo
— Bleacher Report (@BleacherReport) January 4, 2019
El enamoramiento del aficionado con Kawhi fue instantáneo. Jugador de perfil bajo, que no levantaba la voz y que se ganó con su trabajo el derecho a ser importante. En la misma época, Leonard y su equipo contrastaba mucho con los Miami Heat de LeBron James, cuando el ‘King‘ era el villano de la NBA junto a Wade y Bosh. Leonard fue el líder de la defensa de San Antonio, se encargó de bailar con LeBron, le secó y ganó el anillo en 2014 para los texanos. Con el añadido de que su crecimiento en ataque le valió para conquistar el MVP de las Finales.
Kawhi explotó definitivamente hasta ser el astro sobre el que giraban los Spurs. Estaba sano, jugó más de 70 encuentros y anotó más de 20 puntos por noche durante dos años. Tras ese momento, todo cambió. Una extraña lesión le llevó a tener discrepancias con los médicos, la franquicia y Popovich, su gran valedor. Con actitudes impropias en él, se marchó a Toronto Raptors. Dejó momentos inolvidables como su canasta sobre la bocina en las finales de Conferencia. Y, aunque consiguió llevar a la gloria a los canadienses por primera vez en su historia, también salió por la puerta de atrás.
Desde aquel instante, la carrera de Kawhi Leonard ha ido en picado. Se ha puesto en contra a los que le amaban, no atiende a la prensa y se encerró en su burbuja personal. Kawhi siempre destacó por su generosidad y por jugar para los demás… y terminó transformándose en aquello contra lo que luchó.
