Marc Márquez
🛣️​ Motor

Festín de Bagnaia y Ducati entre los abucheos a Márquez

La alegría de Marc Márquez por la pole y el tercer puesto en la carrera al sprint dio paso a la tragedia en la segunda vuelta del Gran Premio de Portugal. El español, que nunca ha ganado en el circuito de Portimão, perdió el control de la Honda y se llevó por delante al piloto local Oliveira. El de Cervera acudió al box de Aprilia a pedir perdón, algo que no consoló a los asistentes, que propinaron abucheos e insultos al seis veces campeón de MotoGP.

🤨 Márquez, sin sorpresas

Márquez, que no era demasiado esperanzador antes de la carrera, ni tan siquiera pudo comprobar en qué punto está la Honda, tras un fin de semana en el que había camuflado el mal rendimiento exhibido en la pretemporada. Ese buen sábado del español fue la única sorpresa del fin de semana, porque la vida sigue igual en la categoría reina. Francesco Bagnaia se puso al frente en la salida e imprimió un ritmo incontestable hasta cruzar primero la bandera a cuadros.

Detrás de él llegó Viñales, que siguió la estela del italiano como buenamente pudo. El podio lo cerró Bezzecchi, también sin oposición. La pelea más interesante fue por la cuarta plaza. Ahí, Zarco le ganó la batalla a un sobresaliente Álex Márquez. Jorge Martín, candidato a todo en esta primera cita del calendario, no sumó ni un solo punto. Tras tocarse con Marc en los primeros giros y caer a la cola de la parrilla, se fue al suelo en plena remontada.

Ducati refrendó así su posición dominante en el Mundial. Cuatro de las cinco primeras plazas tuvieron el sello italiano. La primera Yamaha fue la de Quartararo —octavo clasificado—, que concluyó la prueba sin cara de muchos amigos. La primera Honda en asomar fue la de Alex Rins, décimo. En siete días llega el Gran Premio de Argentina, donde Márquez tratará de cambiar la inercia.

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