El fútbol puede ser muy cruel. En la superfinal del Mundial vivida en Catar contra Argentina, Kylian Mbappé se quedó con la miel en los labios. No será por no intentarlo. Marcó los tres goles de su equipo en el partido y anotó su lanzamiento en la tanda de penaltis. Más no pudo hacer. Sin embargo, se va sin poder revalidar el título de campeones que sí consiguió en Rusia 2018. El magnífico delantero del PSG se marcha de Catar con ocho goles, máximo goleador, y dos asistencias. Con 12 goles en dos Mundiales; sí, 12, iguala a Pelé. Y solo tiene 23 años.
⭐ De no ser por Messi, Mbappé hubiese reinado en Catar
Tras el ’10’ de Argentina, Mbappé ha sido el jugador más determinante en Catar. No ha brillado en todos los partidos, pero cuando ha aparecido, su peso ha sido fundamental. Gol y asistencia contra Australia en el debut, dos goles contra Dinamarca, otros dos y una nueva asistencia en octavos ante Polonia y hat-trick en la final contra Argentina. Desde Geoff Hurst en 1966 nadie marcaba tres tantos en una final. Además, el espacio de tiempo entre el primer gol y el segundo, 97 segundos, es el más rápido registrado entre dos goles en una final de Mundial.
Por otro lado, Kylian es el jugador más joven en marcar en varias finales. También anotó en la final de Rusia contra Croacia. Cuatro goles en estos partidos decisivos. Nadie ha marcado en la historia tantos como él en finales mundialistas. Y para redondear, es el más precoz en alcanzar los 10 goles en la Copa Mundial. Ya lleva 12 en total. Increíble. De cara al próximo Mundial de 2026, está a cuatro de Miroslav Klose (16), el máximo goleador de la historia de la competición. El récord del alemán corre serio peligro.
👉 El futuro del fútbol mundial es suyo
Pese a sus 23 años, Mbappé lleva ya algunas primaveras marcando la diferencia con rotundidad en la élite. Ya con 17 dejó su huella en el Mónaco. Pasó muy pronto al PSG, que pagó unos 180 millones de euros. Una operación totalmente fuera de lo común. Sin embargo, el jugador está dando la razón a los que confiaron en él. Marca las diferencias en un equipo que, además, cuenta ahora con Neymar y Leo Messi en un plan estrictamente dirigido a ganar la Champions League. Se quedó a las puertas en 2020 contra el Bayern. Este año, amplió su contrato en la entidad de París hasta 2025, desatendiendo los cantos de sirena del Real Madrid.
En 302 partidos como profesional en clubes, ha marcado 222 goles y ha repartido 111 asistencias. En la selección francesa, lleva 36 goles en 66 encuentros. Está a 17 goles de igualar a Giroud como el jugador francés con más goles con su país. Es evidente que si sigue sano le superará. Su gran barrera es haber coincidido con los últimos años, pero también buenos, de Messi y Cristiano Ronaldo, y con protagonistas añadidos como Karim Benzema, Balón de Oro 2021, o Luka Modrić, balón de bronce del Mundial de Catar. A su lado, actualmente y por edad, solo tiene la sombra de Haaland, que también presenta unos números extraterrestres. La nueva lucha por el fútbol mundial está servida, aunque Messi, con 35 años, todavía ostenta el trono.