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Darío Magro, la voz del pádel: «Ninguna disciplina hace 15 o 20 horas de retransmisión»

Hablamos con Darío Magro (Guadalajara, 1985), la nueva voz del circuito World Padel Tour, un entusiasta de su profesión que se inició en la telecomunicación hasta que descubrió lo que más le gusta, el periodismo. Ha sido técnico de sonido, presentador de programas de futbol, ganador de dos premios Antena de Oro, y un gran aficionado al cine. Finalmente, ha encontrado su lugar en el pádel, pese a que no reniega de un pasado que le ha servido de aprendizaje.

Periodista de nacimiento y apasionado del deporte

Con toda esta trayectoria en el mundo de la comunicación —ha trabajado en GOL, Marca TV, TVE, Mediaset…—, nuestro invitado está seguro de que la vida es un ciclo. «Empezar en el mundo del deporte e ir tocando un poco de todo me ha hecho ser el periodista que soy», cuenta Magro a Legal Sport, una persona que se declara muy curiosa, por su afán constante de aprender.

Desde la parte de atrás de las cámaras, como es el montaje, hasta realizar reportajes en múltiples campos como la política, el entretenimiento y la investigación. Darío, con tono de melancolía y aprecio, agradece cada paso en su carrera: «Aprender algo nuevo y crecer es lo importante».

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Darío tiene claro que el periodista no se hace: «Se nace, se nace apasionado por algo». En este caso, en relación con los deportes, Magro considera que un comunicador deportivo tiene que haber vivido el deporte desde dentro o que se lo hayan inculcado en su círculo más cercano.

«Cuando estás viendo cualquier acontecimiento deportivo en casa y te sale solo hablar, o explicar jugadas, ahí está el periodista oculto» explicaba Darío, que durante sus 25 años ha estado vinculado al fútbol, el balonmano y ahora al pádel. Su vida, según nos cuenta, siempre ha estado ligada de alguna forma al deporte.

La otra gran pasión de Darío Magro es el cine, quizás por ello en más de una ocasión hayas escuchado referencias suyas al séptimo arte durante una retransmisión de pádel. El narrador se licenció en comunicación audiovisual, por lo que su formación giró en torno a los guiones y la producción. «Siempre mezclas cosas, el periodismo y la narración te permite tener esta libertad de aunar entusiasmos», relata. De ahí su famoso término «pádel de película».

Darío Magro: «Somos humanos y nos equivocamos»

Darío Magro cogió el testigo de Lalo Alzueta, periodista que narró el pádel entre 2016 y 2021, hasta regresar al campo donde más cómodo se siente, el baloncesto. «Cuando he estado con él he aprendido mucho. Ha sentado las bases de un tipo de narración que, por suerte, entiendo igual«, comenta el entrevistado. Darío Magro, por ello, se perfila con un estilo que define como «continuista», con el objetivo de que el consumidor participe de la tensión de lo que acontece en la pista.

El castellanomanchego se define como un periodista humilde, dado a la autocrítica: «Yo sé que me he equivocado. Cuando estás 20 horas en directo es normal liarla, somos humanos». Por ello, lejos de acomodarse, Darío Magro trata de mejorar cada día aprendiendo de sus compañeros, encajando bien toda crítica constructiva.

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«Ninguna disciplina hace 15 o 20 horas de retransmisión, salvo el World Pádel Tour«, recalca el entrevistado. Quizás de ahí que incida mucho en la importancia de mantener a los oyentes conectados, enganchados a la retransmisión. Darío Magro es consciente de que son «muchos datos» e incluso «cambios inesperados» que les pueden llevar a cometer errores.

El auge del pádel es palpable en la sociedad, con récord en número de pistas y con tres años cerca de las 100.000 licencias federativas. El narrador también lo percibe de cerca: «Mi madre se ha convertido en la mayor fan, más que yo a veces (risas)». Darío Magro reconoce que su círculo «está pendiente de cada retransmisión», y que su madre, en ocasiones, hasta le advierte de que van tarde a la hora de emitir.

Queda Darío Magro para rato, un periodista que busca seguir creciendo, desde la «humildad» y con el objetivo de «contar las cosas de la mejor manera«. Ese es precisamente su objetivo, siempre de una forma que le permita «disfrutar. Una persona sencilla, concreta, que ya ha creado una famosa frase que conoce todo el circuito: «Hola, ¿qué tal? Saludos y bienvenidos al mejor pádel del mundo».

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