Carlos Martín es una de las mayores sensaciones del inicio de temporada en la Segunda división. El delantero cedido por el Atlético de Madrid en el Mirandés es el máximo artillero de la competición. Martín aterrizó en Anduva con una misión casi imposible: hacer olvidar a la grada los goles de Raúl García de Haro. El delantero de Osasuna, que en aquel momento pertenecía al Betis, enamoró a Miranda de Ebro con sus actuaciones y aprovechó su espectacular campaña para dar el salto a Primera.
Las cesiones para formar chavales jóvenes en la categoría de plata son la fórmula más repetida por el Mirandés para intentar conseguir el objetivo de mantenerse en el fútbol profesional. El Atlético de Madrid tiene muy buenas relaciones con el conjunto jabato y quiere repetir la receta que ya usó con Rodrigo Riquelme y Sergio Camello, delanteros que ahora son importantes en el máximo nivel del fútbol español.
🐯 Carlos Martín, más que un ‘9’ al uso
Carlos Martín pasó por prácticamente todas las categorías inferiores del Atlético de Madrid hasta debutar en 2021 con el primer equipo. Aquella temporada disputó la Youth League, donde destacó más en su faceta de asistente que como goleador. Con el filial rojiblanco explotó en 2022 y fue una de las claves para que el equipo alcanzara el ascenso a la Primera federación. ‘El Tigre’ anotó 18 tantos y marcó 2 más en la promoción de ascenso, a la par que disputó cuatro partidos bajo las órdenes del ‘Cholo’ Simeone en Primera división.
Martín lleva el número 9 en la espalda, pero es mucho más que el clásico delantero de área. Se le podría definir como un jugador de dos vías. Puede ser la referencia del equipo, y en ocasiones actúa como tal, pero no es su trabajo principal. Como ya se vio en el Atlético tiene una enorme facilidad para ver puerta, aunque muchos de sus goles son en acciones en las que aparece desde la segunda línea. También tiene muy trabajados los disparos lejanos.
En el mapa de calor que combina sus cinco primeros partidos con el Mirandés se puede observar que Carlos Martín interviene prácticamente por todo el campo. De las 43 veces por choque que toca el balón, más de 5 son en campo propio. Claramente, le gusta descolgarse y mediapuntear para entrar en contacto con el cuero. Adora participar en la construcción de las jugadas. Aprovecha el 1-4-4-2 con el que forma Alessio Lisci para descolgarse y desde ahí acelerar, filtrar y generar ventajas para sus compañeros.
En ciertos aspectos se parece mucho al juego de su predecesor, un Raúl García que ya fue imprescindible para los jabatos. Sin embargo, Raúl es más ‘9’ puro que Carlos Martín, más letal, aunque son perfiles bastante similares. Comparten también una enorme habilidad para el desmarque con el que abren mucho espacio para sus compañeros. Raúl García, a primera vista, da sensación de no ser tan habilidoso como es, mientras que Carlos es más suelto y móvil, además de ser el primero en presionar y recuperar balones (más de 4 por partido).
🤯 Exhibición ante el Andorra
Junto con el nuevo delantero de Osasuna comparte infinidad de cualidades que nadie destacaría si no fuese por su capacidad goleadora. Raúl terminó como el segundo máximo goleador de Segunda división la pasada campaña y Carlos se ha convertido en el jugador más joven de la categoría de plata desde la 2008/2009 en marcar cinco goles en sus cinco primeros partidos.
En la última jornada en la que el Mirandés fue el equipo alocado de siempre, sea cual sea el integrante que ocupe el asiento principal del banquillo, Carlos se salió. El Andorra sufrió las consecuencias del madrileño, que fue indetectable para los rivales. Participó en tres de los cuatro goles de los de Lisci con dos dianas y una asistencia. Su segundo gol quedará ya en los libros de Segunda división, un taconazo maravilloso después de un control inverosímil para dar la victoria a su equipo en el minuto 97.
Una auténtica locura que solo se les pasa por la cabeza a los cracks. Anteriormente, ayudó a abrir la lata con un espectacular pase filtrado desde campo propio que dejó solo a Gabriel Martínez, y posteriormente marcó el gol que significaba el 2-0 momentáneo. Un partido perfecto del delantero madrileño que ha catapultado al Mirandés de Alessio Lisci hasta las posiciones cercanas al playoff de ascenso a Primera.
🏗️ Miranda de Ebro, la subcontrata del Cerro
El caso de ‘El Tigre’ es tan solo el último de la lista en cuanto a canteranos del Atlético de Madrid que han terminado de forjarse fuera del Cerro del Espino y que han dado sus primeros pasos en el fútbol profesional en el Mirandés. La relación de amistad entre el club colchonero y el jabato comenzó en la temporada 2021/2022 con las cesiones de Sergio Camello y Rodrigo Riquelme.
‘Roro’ tuvo un paso espectacular por el Mirandés. El ‘Atleti’ decidió que se marchase fuera en la 2020/2021. Jugó cedido, sin éxito, en el Bournemouth y para la campaña siguiente aterrizó en Anduva junto a Sergio Camello. Riquelme anotó 7 goles y repartió 12 asistencias en 36 partidos con los jabatos. Camello, por su parte, que venía de un año discreto en el apartado goleador con el filial rojiblanco, explotó en el Mirandés con 15 goles y 4 asistencias en 36 encuentros.
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— Club Deportivo Mirandés (@CDMirandes) September 10, 2023
Desde entonces la relación entre los dos clubes es total y, aunque el experimento no saliese bien con Javi Serrano en 2022, Carlos Martín ha llegado para seguir el ejemplo de ‘Roro’ y Camello. El ‘Atleti’ no es el único club que aprovecha sus relaciones con los jabatos para cederles proyectos de futuro, pero sí el que más rédito está consiguiendo. El Mirandés actúa como la etapa final de la formación, asume el riesgo de la inexperiencia con la que llegan, y se aprovecha de su talento para mantenerse en Segunda división, mientras que el Atlético de Madrid recibe el beneficio final.