«Ha encabronado a prácticamente todos los entrenadores que le han tenido bajo sus órdenes», escribía el periodista Marc del Río —SPORT— para definir a la perfección a Mike James, el nuevo emperador de la puntuación en la Euroliga. El base del Monaco alcanzó su nueva meta anotadora (4.464 puntos) y amenaza con dejarla en una cifra inalcanzable para sus rivales.
Mike James es un sistema en sí mismo. Tanto es así que no son los entrenadores quienes le tienen bajo sus órdenes; sino que es él quien les tiene dominados a ellos. Los técnicos que quieran contar con el norteamericano en sus filas deben asumir que las cosas se harán a su manera y que, a buen seguro, en numerosas ocasiones sus directrices serán completamente ignoradas. Esa forma de entender el baloncesto es la que hace único al polémico y alocado Mike James.
New guy 𝐎𝐍 𝐓𝐎𝐏👑
Take a look at the updated scoring leaderboard with @MrNatural_05 at the helm!📈 pic.twitter.com/LjmrlmrkU6
— Turkish Airlines EuroLeague (@EuroLeague) March 8, 2024
💔 Mike James, o le amas o le odias
Michael Perry James nació en Portland (Oregon) en 1990 y ya desde pequeño tuvo unas cualidades extraordinarias para el baloncesto. Siempre soñó con ser la estrella de un equipo NBA, pero, sin ofertas universitarias de renombre, se decantó por la de Eastern Arizona College. Allí ya demostró que sería jugador de un solo club. Tras dos años con los Monsters pidió ser transferido a la Universidad de Lamar y finalizó su carrera en la NCAA con los Cardinals.
James se reconocía como el mejor, por lo que no podía aceptar el varapalo de no salir elegido en el draft de la NBA de 2012. Así, dio el salto a Europa al fichar por el KK Zagreb. En Croacia no duró mucho, se movió a Israel, primero; y a Grecia, después, antes de que Baskonia le ofreciera la mayor oportunidad de su vida. Alfredo Salazar vio en James el potencial para convertirse en uno de los superanotadores más increíbles del baloncesto europeo.
Descubriendo la mejor red de ‘scouting’ de Europa: Baskonia ‘pesca’ a las estrellas de la Euroliga
El fichaje fue todo un acierto. Baskonia pegó un pelotazo con Mike James que les condujo hasta la Final Four de la Euroliga. El de Portland promedió casi 11 puntos por partido y todo Europa quedó encandilada de su figura. Panathinaikos, que comenzaba su travesía por el desierto después de tiranizar el continente, le pagó un millón de euros por curso para hacerse con sus servicios. En Grecia dio un paso más hasta alcanzar los 16 puntos por choque… en un equipo que ya jugaba por y para él.
🇺🇸 Sueño frustrado en NBA
Entre medias, le llegó su sueño NBA: Phoenix Suns y New Orleans Pelicans fueron sus equipos. Descubrió la cruda realidad de la mejor liga del mundo y, de vuelta en Europa, salió por la puerta de atrás de Panathinaikos y acabó recalando como refuerzo estrella de Ettore Messina en Armani Milan… donde también acabó mal con el italiano y tuvo que buscar refugió en Moscú.
En el CSKA, Mike James ya era capaz de promediar la sorprendente cifra de 21 puntos por partido. Finalmente, Dimitrios Itoudis se cansó de chocar con el base. James probó la NBA una vez más en los Brooklyn Nets de James Harden, Kevin Durant y Kyrie Irving, pero bastantes problemas se cocinaban por Brooklyn como para además transigir la exigencias de un Mike que terminó fatal en Nueva York.
Entonces, ¿confiaría alguien en un jugador que a duras penas puede encadenar dos temporadas seguidas en el mismo equipo? Pues sí. Monaco apareció para convertirle en la joya de un proyecto que esperaba conquistar la Euroliga a base de talonario. Sasa Obradović ha sido el único entrenador que le ha entendido y que ha aceptado que, a veces, Mike James va a hacer lo que quiera. Ese es el precio que desde el Principado deben pagar para acercarse al título continental.
Tras tres cursos en Monaco, Mike James parece haber madurado de una vez por todas. El base es más completo que nunca y aporta en todas las facetas del juego, pues rebotea, asiste y anota, como siempre. Este curso promedia 19,3 puntos, 4,4 rebotes y 5,2 asistencias con las que se ha convertido en el candidato número uno a ganar el MVP. También ha podido superar a una leyenda como Vasileios Spanoulis como el máximo anotador histórico de la Euroliga. Ahora, la pregunta es: ¿dónde dejará Mike James su marca anotadora?