Los Memphis Grizzlies son una de las franquicias de la NBA que más polémica ha generado esta temporada. No parecían un equipo ruidoso; más bien todo lo contrario, de perfil bajo. Como el candidato underground de muchos aficionados, los Grizzlies comenzaron la temporada a buen ritmo, pero el lío de Ja Morant y las acusaciones de varios rivales de ser excesivamente duros les han sumido en la oscuridad. Inmutable en medio del caos, los altibajos y el ruido, el español Santi Aldama emerge entre la polémica como un faro en medio de la tormenta.
©️ Aldama, líder frente a Dallas Mavericks
Ante los Dallas Mavericks, Santi Aldama firmó su mejor partido en la NBA. Disputó 27 minutos desde el banquillo y cosechó un doble-doble de 22 puntos y 14 rebotes; ambos máximos de su carrera. Aldama fue importante en ataque, ya que, sin Ja Morant, los Grizzlies llevan algo atascados varias jornadas. Por si fuera poco, Aldama también tuvo tiempo para repartir 2 asistencias.
Aldama partió como sexto hombre, pero no tardó en instalarse en pista al lado de los presuntos titulares. Incluso por delante de todo un All-Star como Jaren Jackson en ciertos momentos. El canario ayudó a los Grizzlies a abrir la pista con su amenaza desde el triple. Además, Aldama fue una fuente vital de puntos para sus compañeros al regalar segundas oportunidades en demasía a través del rebote ofensivo.
🏃 Trabajo desde la sombra para poder iluminar
A pesar de tener ofertas de equipos ACB para jugar en categoría inferiores, Santi Aldama se formó hasta los 18 años en Canterbury Lions Academy de su Gran Canaria natal. Desde la isla, su futuro estaba monitorizado para seguir el estilo de crecimiento de un jugador estadounidense. Primero instituto y luego cruzar el charco para jugar en la NCAA y competir en el March Madness serían los pasos a seguir.
Aterrizó en la Universidad de Loyola, donde jugó durante dos temporadas antes de dar el salto a la NBA. En su segunda campaña con los Greyhounds, Aldama promedió un doble-doble (21,2 puntos y 10,1 rebotes). Su salto al draft y su periplo norteamericano no tuvo especial seguimiento desde España, a pesar de que Santi será, de forma indiscutible, uno de los grandes fenómenos españoles del futuro en la NBA y uno de los jugadores de más calidad de los próximos años en la Selección.
La pasada campaña le costó adaptarse; o mejor dicho, Taylor Jenkins no confió en él para entrar en la rotación. Porque, realmente, siempre mostró estar preparado para jugar con los Grizzlies. Aldama disputó parte del año en la G-League y cerró el año en Memphis. Este curso, ya como jugador de pleno derecho de la franquicia de Tennessee, sus números han crecido hasta los 9,3 puntos y 4,8 rebotes de media por encuentro. Todavía son figuras discretas en sus 22 minutos de promedio.
Más allá de los números, el papel del Aldama ha sido clave en momentos importantes y partidos difíciles. Su desempeño ha ayudado a Memphis Grizzlies a sacar adelante duelos directos. Cada día que pasa, Taylor Jenkins se entrega más a Santi, aunque sea desde el banquillo. Su importancia va en aumento, más si cabe durante la ausencia de Morant.
