Atlético de Madrid

El Atlético renace en casa a costa de un Betis con fe tardía

Lo más importante para los rojiblancos, visto lo visto, era ganar. Objetivo cumplido (2-1) para el Atlético, contra un Betis superado de inicio, pero tremendamente batallador tras el descanso. Lo que perdió fue la oportunidad de quitarse el mal sabor de boca, después de convencer en la primera parte y de encarrilar la contienda con el gol en propia meta visitante y la rúbrica de Álvaro Morata, pero de perder por completo su superioridad en otra segunda mitad para el olvido. William Carvalho acortó distancias y los sevillanos rozaron el empate en varias ocasiones.

Oblak Atlético de Madrid Betis

Jan Oblak sostuvo al Atlético de Madrid ante las acometidas del Betis en la segunda mitad.

🧤 Rui Silva no bastó para sostener al Betis

El Atlético de Madrid venía muy tocado a este partido, tras el batacazo copero ante el Athletic Club. La duda estaba en si veríamos un equipo alicaído, apático y sin ideas, como en San Mamés, o uno enérgico y rebelde, con ganas de reivindicarse, como acostumbra desde hace más de un año en su feudo como reclama siempre el Metropolitano. Poco tardaron los de Simeone en disipar esa incógnita; sin demasiado control del juego, como viene siendo la tónica habitual, pero con el cuchillo entre los dientes.

El Atlético salió con su versión más agresiva, en el buen sentido de la expresión. Defendiendo hacia delante, con determinación en los duelos y sin ahorrarse desmarques al espacio con Morata arriba, De Paul y Pablo Barrios como interiores y Llorente y Samuel Lino en los carriles. El encuentro, trepidante para el espectador neutral, tuvo demasiado ida y vuelta desde el inicio. No parecía mala fórmula para los locales, en todo caso, que defendieron lejos del área resguardado por Oblak, recuperaron balones peligrosos en campo contrario, montaron transiciones fulgurantes y generaron ocasiones de sobra como para haber sentenciado al Betis en el primer tiempo.

 

Rui Silva fue el héroe del equipo verdiblanco, quien evitó que De Paul, Memphis y, especialmente, Morata, sumaran al menos un gol en su cuenta particular en la primera media hora. El delantero español provocó un penalti que no transformaría ni en primera instancia ni en los tres rechaces posteriores. Una de las dos paradas antológicas del choque, que no impediría el gol a la postre del ‘9’, al filo del descanso. En la otra cara de la moneda, el que salió retratado para mal fue Héctor Bellerín, sobrepasado por la cita y muy desacertado en sus entregas. Así nació el 1-0, sin ir más lejos, además de por un buen anticipo y acción ofensiva de Mario Hermoso hasta terminar en el área pequeña rival, con ganas de olvidarse del partido de San Mamés.

🥵 Al Atlético se le hizo eterno el segundo periodo

El Betis mejoró a medida que avanzó el primer acto, pero apenas intimidó, más allá de algún ataque aislado a balón parado y de una buena jugada entre Pablo Fornals y Rodri Sánchez. Este segundo, como mediapunta, ante las ausencias de Isco y Fekir. A Pellegrini le tocaba mover ficha, no se demoró en hacerlo y acertó de pleno con su gestión de campo. Tras la reanudación, encontró la pausa y claridad en sus posesiones de la mano de William Carvalho como el centrocampista más adelantado y de un Guido Rodríguez que jugó junto a Johnny Cardoso, el que será su sustituto en plantilla ahora que parece que el argentino no renovará.

 

Fue precisamente William Carvalho el que cambió el choque, con un zapatazo de media distancia que le quitó las telarañas a la escuadra, después de que Mario Hermoso perdonara el 3-0. El Betis fue in crescendo y el Atlético de Madrid, que ya de por sí tiene un grave déficit de control, perdió el descanso con balón y se hundió muy atrás. Ayoze Pérez, otro recién ingresado, estuvo a punto de devolver las tablas al marcador a cuarto de hora para el final, pero se topó con Jan Oblak. Y, no contento con eso, el esloveno también quiso marcharse a casa protagonizando una de las paradas de la liga, cuando es uno de los señalados en la crisis rojiblanca. Esta vez fue a Guido, a la salida de un córner.

Los andaluces no tiraron la toalla y avasallaron hasta el final a un Atlético de Madrid que terminó con Witsel de mediocentro por la salida de Stefan Savić, en el eje junto a Hermoso y Paulista, mientras Nahuel Molina y Reinildo Mandava cerraban los laterales. Sabor agridulce para ambos, dentro de que el Atlético dormirá en plazas Champions pase lo que pase en la visita del Barça al Athletic. El Betis, por su parte, se queda a 13 puntos de los colchoneros, que cierran el top 4 y se complican su acceso a Europa, con Real Sociedad, Valencia, Las Palmas y Getafe al acecho.

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