La selección española visita este jueves Chipre en el penúltimo encuentro de la fase de clasificación para la Eurocopa de 2024. Con el billete asegurado para el torneo, el combinado de Luis de la Fuente quiere asegurarse el primer puesto del grupo. Chipre no tendría que suponer un escollo muy complicado. En los ocho encuentros previos, la ‘Roja’ ha ganado siete y ha marcado 41 goles. El enfrentamiento entre ambos países es sinónimo de triunfo y goleada para el equipo español, salvo en un caso.
El 8 de septiembre de 1998 la selección viajó a esta isla del Mediterráneo oriental para afrontar la fase clasificatoria para la Eurocopa del 2000. Una España dirigida por Javier Clemente y que vivía tiempos convulsos y de combustión. Todo acabó de explotar en Lárnaca. El equipo chipriota, repleto de jugadores amateurs, se impuso 3-2 a los españoles en lo que se recuerda como una de las derrotas más humillantes para la ‘Roja’ y que supuso el adiós de Clemente como entrenador tras seis años.
😨 España nadaba entre la desazón y la polémica
Javier Clemente estuvo al mando de la selección española desde el 1992 hasta el 1998. Seis años marcados por altibajos y por imágenes de otra época, aquella con la mítica montonera de micrófonos en la mesa que presidían las ruedas de prensa, los cigarrillos en la mano pese a la presencia de las cámaras y con la crispación en el ambiente que se respiraba en cada concentración. No entre los jugadores, que estaban a muerte con Clemente, sino entre la prensa y el técnico. España vivió sumida en una batalla futbolística y periodística que separó a los partidarios de Clemente y los enemigos del técnico de Barakaldo.
Javier Clemente durante una concentración de España.
La imagen del vasco era la de un tipo temperamental, directo y que no rehuía la confrontación. Un old school de manual y que priorizaba el resultado a las formas. Llegó a decir que en España y en los medios había muchos «fracasados» cuando los periodistas hacían mención a la palabra fracaso para dictaminar los resultados de la selección. Pese a tener futbolistas de renombre como Zubizarreta, Pep Guardiola, Abelardo, Julio Salinas, Alkorta, Nadal, Hierro, Amor, Goikoetxea, Bakero, Luis Enrique, Julen Guerrero, Raúl, Morientes o Alfonso, España cayó en los cuartos de final del Mundial de 1994 y de la Eurocopa de 1996 y no pasó de la fase de grupos del Mundial de 1998.
Aunque polémico, Clemente también dejó imágenes cercanas como en la previa del Mundial de Francia 98, donde el equipo nacional grabó con su propia voz la canción Quiero Estar Contigo con la cantante Rosana y en la que el técnico baracaldés estuvo dicharachero. También se recuerda el anuncio que la marca Adidas preparó para la selección de cara a ese torneo, que acabó de la peor forma posible.
😫 Chipre espió a España y acabó con Clemente
Clemente concebía la palabra dimitir como una derrota. Por su parte, Ángel María Villar, presidente por entonces de la RFEF, también le mostró su apoyo en todo momento. Por ese motivo, y al tener contrato en vigor, siguió al frente del equipo nacional pese a caer a las primeras de cambio en Francia 98. Ese mismo 1998 España abrió la fase de clasificación para la Eurocopa del año 2000. La primera parada fue Lárnaca, una ciudad portuaria de apenas 50.000 habitantes y ubicada en la costa sur de Chipre. El estadio Antonis Papadopoulos fue testigo de una de las derrotas más bochornosas de España.
La miniserie ‘La España de Clemente’, producida por Movistar+, recuerde ese episodio del combinado nacional. Panayiotis Engomitis, exjugador de Chipre, revela la poca profesionalización de ese equipo: «Yo trabajaba en una compañía de telecomunicación». Su compañero Pambos Pittas reconoció ser banquero en aquella época, mientras que Panikos Georgiou, el entrenador, era el oficial encargado de la política nacional de inmigración.
Con una selección inferior, Chipre se buscó las castañas para intentar competir el partido. España aterrizó en Nicosia y entrenó en esa misma ciudad, algo que aprovechó el seleccionador chipriota para llamar a un periodista y subir hasta su oficina, donde tenía amplias vista del campo de entrenamiento donde se ejercitó la selección. Georgiou pudo presenciar todo lo que iba a hacer Clemente en el encuentro.
El 8 de septiembre de 1998 el combinado nacional jugó con Cañizares; Salgado, Alkorta, Nadal, Sergi; Hierro, Etxeberria, Luis Enrique; Raúl, Morientes y Alfonso. Un entrenador como Clemente, conocido por ser un técnico defensivo, saltó ese día en Chipre con cinco delanteros. Sin embargo, el acierto fue de los chipriotas, que ganaron 3-2 con los tantos de Panayiotis Engomitis, Siniša Gogić y Milenko Špoljarić. Por parte de España marcaron Raúl y Morientes. «El error fue que chutaron tres veces y las tres fueron a la escuadra», reconoce Clemente.
🫤 Hasta la política española pidió el adiós de Clemente
Tras el encuentro el ambiente caldeado varios días. Una vez más, Villar rechazó la idea de echar a Clemente, pero la ola de críticas ya era imparable. Hasta la por entonces ministra de Educación y Cultura, Esperanza Aguirre, se mostró partidaria de la destitución del seleccionador: «Los aficionados se merecen que se les vuelva a subir la moral y que se les dé una luz en este largo túnel que viene ya desde el Mundial». Otras formaciones como el PP, PSOE o IU también veían con buenos ojos la salida del de Barakaldo.
«Era un pedazo de selección increíble y les eclipsó aquellas broncas», comenta actualmente Javier Clemente. «Uno de los mejores seleccionadores del mundo, le duela a quien le duela», recalca Alkorta. «Es de los mejores entrenadores que ha tenido este país», apunta Abelardo en la pieza de Movistar+. Hoy en día y pese a no estar entrenando, Clemente sigue en la memoria del fútbol y en la actualidad de todos.
Fue Chipre, una de las selecciones más débiles del panorama mundial, quien acabó con su legado como seleccionador. 25 años después de esa derrota, España visita esta isla del Mediterráneo con una historia muy distinta. El combinado nacional está por méritos propios entre las grandes. Con un Mundial, dos Eurocopas y una Nations League más en el palmarés. Aunque es cierto que en el fútbol nunca te puedes fiar…
