Una de las situaciones más surrealistas de la historia de la NBA tuvo lugar en la campaña 2007/2008, concretamente el 19 de diciembre de 2007. Aquel día, Atlanta Hawks y Miami Heat jugaban un partido de temporada regular en el entonces Philips Arena, actual State Farm Arena; la pista de los Hawks. Tras disputar los cuatro cuartos, el duelo, que estuvo muy igualado, se fue a la prórroga con el resultado de 104-104.
Hasta aquí todo normal, pero lo extraño sucedió durante el tiempo extra. Atlanta terminó como vencedor del choque y se impuso a Miami por 117 a 111. Una vez finalizado el partido, los Heat presentaron una queja ante la liga, ya que, durante la prórroga, un error de la mesa le otorgó a Shaquille O’Neal una falta que no cometió y que acarreó su expulsión del encuentro a falta de 50 segundos para terminar. Sin embargo, O’Neal solo tenía cinco faltas por lo que nunca debió ser expulsado.
🏀 El partido más corto de la NBA
El mítico Udonis Haslem, que se retiró durante el verano de 2023 y que disputó toda su carrera NBA en la franquicia de Florida, fue el autor de dicha falta. La mejor liga del planeta estudió a fondo el caso y terminó por dictaminar el fallo a favor de Miami Heat. Por lo tanto, la NBA obligó a que los 50 segundos restantes del partido se tuvieran que volver a jugar con el resultado de 114-111 a favor de los Hawks.
La fecha elegida para que Atlanta Hawks y Miami Heat se volvieran a ver las caras en el estado de Georgia fue el 8 de marzo de 2008. Primero se disputarían los 50 segundos correspondientes al choque anterior y después el partido normal previsto para ese día. Los Hawks de Mike Bibby, Joe Johnson, Al Horford y Josh Smith, dirigidos por Mike Woodson estaban en auge en aquella época. Mientras, los Heat venían de capa caída después de alcanzar la gloria en 2006 de la mano de ‘Shaq’ y Dwyane Wade bajo la dirección de Pat Riley.
Shaquille O’Neal, durante su etapa en los Phoenix Suns.
Estás muy equivocado si crees que lo más extraño se queda en que se disputó un enfrentamiento de 50 segundos. Miami Heat traspasó a Shaquille O’Neal justo un mes antes a los Phoenix Suns a cambio de Shawn Marion y Marcus Banks. Ambos jugadores no podían disputar el partido, puesto que en aquel momento pertenecían a la franquicia de Arizona y ‘Shaq’ tampoco porque ya estaba en Phoenix.
Finalmente, se jugaron esos 50 segundos y nadie anotó una canasta, por lo que Atlanta Hawks se proclamó vencedor del encuentro por 114 a 111 y se convirtió en el primer y último equipo de la NBA que ha ganado un duelo sin anotar ni un solo punto. Además, los Hawks se llevaron también el segundo choque, en el que sí que jugaron Marion y Banks por 97 a 94 para cerrar una de las noches más surrealistas de la historia de la mejor liga de baloncesto del mundo.
