El sorteo de la última ronda previa a la fase de grupos de la UEFA Conference League no fue benévola para Osasuna. Su escollo final, tras un verano de idas y venidas legales para entrar en Europa, será el Brujas belga. Rival a batir estas últimas temporadas en su país, con una mezcla interesante entre veteranía y juventud que, sin embargo, llega en mitad de la tempestad a la eliminatoria estrella de este jueves. Su último año ha sido una montaña rusa de emociones. Y, este verano, se han visto obligados a vender a varios de sus mejores futbolistas.
😰 El Brujas, en crisis
Hace un año, todo era concordia e ilusión en el norte de Bélgica. El gigante de Brujas venía de ganar cinco de las últimas siete ediciones de la Jupiler Pro League. Las tres más recientes en ese momento, de forma consecutiva. Para más inri, se convirtieron en el equipo revelación de la Champions League, después de plantarse en mitad de la fase de grupos con pleno de victorias y ningún gol en contra, frente a rivales de entidad como el Oporto, Bayer Leverkusen y Atlético de Madrid. Todo se torció en ese momento de plenitud y, además de quedar muy descolgados de la lucha por revalidar el título doméstico dentro de sus fronteras nacionales, se complicaron la vida en la máxima competición continental de clubes.
Ferrán Jutglà fue uno de los jugadores revelación en la pasada Champions League, nada más llegar a Brujas procedente del Barça B. Este verano la operación se ha repetido con Víctor Barberá, que llega libre.
Finalmente, accedieron a los octavos de final por primera vez desde el cambio de formato de la Champions, a principios de los 90′. Sin contar, por tanto, las ediciones anteriores, en las que llegó a acariciar ‘La Orejona’. El Liverpool de Bob Paisley les privó de la gloria, al llevarse la final disputada en Wembley en 1978, gracias a un solitario gol de Kenny Dalglish a media hora para la conclusión. Evidentemente, eso parecía inalcanzable la temporada pasada, pero por qué no pensar en que, siendo primeros, podrían soñar con unos cuartos de final. Nada más lejos de la realidad.
Dado el mal rendimiento del Brujas en la liga belga, Carl Hoefkens, que venía de ser el entrenador sensación en el inicio de la Champions por su valentía y flexibilidad táctica, fue cesado. Y, a partir de entonces, el equipo se cayó por completo. Fue una decisión muy extraña, porque, además, le sustituyó Scott Parker, el estratega inglés que venía de ascender al Bournemouth y que no sobrevivió a las primeras jornadas de Premier League. El exjugador del Tottenham apenas dirigió tres meses al cuadro de Flandes, a consecuencia de la goleada (7-1 global) ante el Benfica de Roger Schmidt en octavos de final y de marchar en mitad de tabla en liga.
El Brujas ha ingresado en torno a 50 millones de euros por las ventas de Abakar Sylla (20), Noa Lang (15), Clinton Mata (5), Jack Hendry (5), Mats Rits (2), Cyle Larin (1,5) o Ruud Vormer, capitán que se marcha libre.
Sin distracción europea, mejoraron sus prestaciones con Rik De Mil en el banquillo y llegaron a jugar el Grupo de Campeonato por el título, tras ser cuartos en la fase regular. Necesitaban un milagro, en todo caso, por la diferencia de puntos que mantenían respecto al Royal Antwerp, Union St. Gilloise y Genk. Pero a ver quién les descartaba, después de coronarse la 2021/2022 en una situación similar. Esta vez, la proeza no se dio y el Brujas no llegó a molestar a los tres competidores por la liga 2022/2023 más igualada de Europa. ¿Las consecuencias? No entrar en Champions, reducción importante de ingresos de por medio, obligatoriedad de vender por ello a varias figuras y un nuevo cambio de entrenador, el cuarto en seis meses.
Saint Gilloise, Gent y Anderlecht: la rebelión belga en Europa
💀 Sus principales armas
El elegido para dirigir al Brujas esta temporada de la reconquista ha sido Ronny Deila, el noruego que venía de sentarse en el banquillo del Standard de Lieja el curso pasado. A su disposición, aún mantiene a figuras como Ferrán Jutglà o Roman Yaremchuk en el frente del ataque. El español, más móvil. El ucraniano, más acostumbrado a ser la referencia y jugar de espaldas. Dos delanteros que suponen más que una amenaza de cara a puerta, bien dotados en lo técnico y lo táctico. Además, como extremos (o carrileros), Tajon Buchanan y Andreas Skov Olsen también son dos activos a tener en cuenta, por el desequilibrio del canadiense y la delicada zurda del danés, acostumbrado a partir a pierna cambiada.
Denis Odoi y Simon Mignolet, a sus 35 años, aportan la veteranía. Dos de los artífices del gran arranque de fase de grupos que completó el cuadro belga. Polivalente en lo táctico el ghanés, un Azpilicueta semidesconocido. Pero, si hay una demarcación a vigilar, esa es la mediapunta. Ahí lleva años marcando la diferencia Hans Vanaken, habitual internacional con Bélgica y muy completo en lo que a características se refiere: con físico para ganar duelos, recorrido y visión de juego para activar compañeros y, sobre todo, para atacar el espacio desde segunda línea.
💙🖤💙🖤💙🖤 x7. #CLURWD pic.twitter.com/2GtmI9ELhr
— Club Brugge KV (@ClubBrugge) August 20, 2023
Un llegador excepcional y líder de vestuario, que tendrá ahora en Hugo Vetlesen a un socio muy fino para moverse entre líneas, tal y como demostró en el Bodø/Glimt; y a un Raphael Onyedika que mezcla envergadura y distribución en la base. El mercado nórdico sigue nutriendo a un Brujas que amenaza con volver a dar guerra.
