Con la liga terminada, nos paramos a reflexionar sobre cuáles han sido los jugadores que más han defraudado a sus respectivas aficiones y entrenadores. Destaca la presencia del Espanyol, así como de un Sevilla que el pasado verano no estuvo acertado con sus incorporaciones.
🧤 Álvaro Fernández y la portería del Espanyol
Buscar culpables tan concretos de un descenso seguramente no sea del todo pertinente, pero es complicado pensar que el cuadro periquito, con otras actuaciones bajo palos, no hubiera mejorado sus resultados. El titular parecía Álvaro Fernández, que al llegar cedido desde el Huesca le quitó el sitio a Lecomte. Sin embargo, uno y otro fueron alternando… no por aciertos propios, sino por errores de su compañero de puesto. Por el camino, el Espanyol fue dejándose puntos y acercándose peligrosamente al descenso.
Tan erráticos fueron ambos que el Espanyol tuvo que buscar una alternativa en invierno. Fernando Pacheco, incluso, heredó la maldición y también cometió algunos fallos que les condenaron. Respecto a otros nombres que podrían haber ocupado el puesto cabe destacar el caso de Pepe Reina. En el Villarreal, Reina ha dejado luces y, sobre todo, sombras desde que la dirección deportiva decidiese no incorporar a nadie una vez que Gerónimo Rulli se marchó al Ajax en enero.
😓 En Sevilla no ha sido el año de los defensas
Especialmente, en Nervión, que partió con la idea de suplir a Jules Koundé y Diego Carlos con Marçao, Tanguy Nianzou y Loïc Badé. Por perfiles, Monchi no iba desencaminado, pero la inversión de 12 y 16 millones, respectivamente, no salió como se esperaba. El ex del Galatasaray apenas ha jugado por sus incesantes lesiones y el canterano del Bayern, por los errores de bulto que cometió en la primera vuelta. Badé es el único que escapa de la quema.
Por otro lado, César Montes le costó al Espanyol 8 millones de euros en invierno, tras ser titular con México en el Mundial. El mexicano tampoco ha sido el bastión de la defensa que se esperaba, ni mucho menos el salvador que salvase a los pericos del disgusto.
En los laterales, Héctor Bellerín se lleva esta titularidad poco deseada en el flanco diestro del once. El canterano culé volvió a casa tras una cesión en el Betis que le dejó sin contrato con el Arsenal. Sin minutos ni sitio, Xavi tuvo que reconvertir centrales para tapar las carencias en ese puesto. En enero se marchó casi regalado al Sporting CP, por un millón de euros, después de jugar menos del 10% de los minutos.
Hablando del Betis, la baja de Alex Moreno rumbo al Aston Villa en enero, precipitó la inversión por un nuevo lateral izquierdo. El elegido fue Abner Vinícius, procedente del Athletico Paranaense, a cambio de 7 millones de euros que ni de cerca sirvieron para mitigar la salida del ex del Rayo. Sergio Reguilón en el Atlético, y Angileri y Jordan Amavi, del Getafe, son otros candidatos que bien podrían haber ocupado el lateral izquierdo de decepciones ligueras.
🤒 Tres jugones que han jugado poco en la liga
Luis Milla, Ander Herrera e Isco Alarcón cambiaron de equipo con la intención de que Getafe, Athletic Club y Sevilla diesen un salto de calidad en la sala de máquinas. Los dos primeros equipos, necesitados de perfiles pasadores más creativos desde hace tempo. Sin embargo, el rendimiento de todos ellos ha sido una decepción; en parte, por las constantes lesiones que han padecido Milla y Ander. Isco, por la suya, dejó la sensación de que podía resurgir de sus cenizas, pero pronto se apagó. De hecho, desde diciembre no tiene equipo.
Ilaix Moriba y Nico González en el Valencia también han estado lejos del mínimo exigible. Candidatos claros al puesto. Que Javi Guerra haya tenido tal impacto no deja de ser una mala noticia por lo mal que han funcionado los centrocampistas más contrastados. Vinicíus Souza en el Espanyol es otro que ha ido de más a menos con el Espanyol, decepción total en el final de curso.
🥶 Lejos de la Real Sociedad hace mucho frío
Que Imanol Alguacil es un potenciador de talento ya lo sabíamos. Que la temporada de Cristian Portu y Adnan Januzaj al salir de Donostia iba a ser tan testimonial, ni lo intuíamos. El primero, cedido al Getafe, levantó un poco el vuelo en el final de curso con Pepe Bordalás, aunque con Quique Sánchez Flores ni se acercó a ser ese perfil de rebeldía futbolística que tanto pedía el Coliseum Alfonso Pérez. El belga, por su parte, llegó libre al Sevilla y salió cedido en invierno rumbo al İstanbul Başakşehir. ¡Solo jugó el 3% de los minutos con Lopetegui y Sampaoli en sus inicios!
En el frente del ataque, Edinson Cavani tampoco ha pasado el examen que tenía en Valencia. Comenzó bien, en cuanto a goles y por su aportación con descargas y apoyos fuera del área. Duró poco, en cualquier caso. Y, a medida que el conjunto che se metió en graves problemas por el descenso, el rendimiento del charrúa cayó empicado simultáneamente. Llegó libre, pero con salario y estatus de estrella. El Mundial, al que acudió tocado con Uruguay, puede que le haya pasado factura a un jugador que parece en clara fase de declive.