⚽ Real Madrid

El Valencia paga su falta de contundencia ante Rodrygo y Vinícius

En menos de una hora, el Real Madrid sentenció (5-1) al Valencia en el Santiago Bernabéu. Si bien es cierto que los de Baraja amagaron con amenazar a los de Ancelotti en algunos tramos del primer periodo y que hasta dispusieron de tres ocasiones claras, el encuentro se saldó con una rotunda goleada merengue a causa de la diferencia de acierto entre ambos conjuntos.

Vinícius, con un doblete; y Rodrygo, con otro par de dianas y dos asistencias más en su cuenta particular, decantaron la balanza. Con el encuentro resuelto, por si fuera poco con el rapapolvo final, Gayà se marchó tocado en el fin de semana previo al parón internacional para el que estaba citado por Luis De La Fuente.

🥊 El Real Madrid, ganador en el intercambio de golpes

De inicio, el duelo se antojaba más cerrado de lo que vimos en realidad, con dos propuestas similares por parte de Carlo Ancelotti y Rubén Baraja. Ambos cerraban con un 1-4-4-2 en bloque medio cuando el rival se hacia con la posesión, sin saltar en exceso hacia delante para no abrir tantas puertas a su espalda. Sin sorpresas por parte de los visitantes en cuanto a nombres, mientras que en los locales repitió Brahim Díaz como titular en el centro-izquierda, en el lugar de un Jude Bellingham renqueante de sus dolencias en el hombro, que impidieron que el inglés entrase en la convocatoria.

En la práctica, el duelo fue muy abierto, con ritmo alto, poco control, mucho ida y vuelta, y ocasiones para ambos bandos. De los que le gustan a Camavinga para lucir como centrocampista. El Real Madrid no perdonó la primera, originada por un pase medido de 50 metros de Toni Kroos, que transformó con un latigazo de zurda desde la frontal un Dani Carvajal que continúa en estado de gracia.

Poco después, el centrocampista alemán estuvo a punto de poner tierra de por medio con un libre directo que acarició con dulzura, pero que repelió el travesaño. El ‘8’ sintió que tenía que hacer que ‘Pirri’, su antecesor en la sala de máquinas del Real Madrid, nombrado presidente de honor del club esta misma mañana, disfrutase del nivel de un distribuidor sin parangón.

Fue entonces cuando el Valencia pudo correr y activar los movimientos incansables de un delantero más amenazante que acertado de cara a puerta, la tónica habitual del canterano del Real Madrid. Hugo Duro pudo haberse llevado el balón a casa por haber marcado un hat-trick, de no ser porque Andriy Lunin detuvo dos de sus tres ocasiones manifiestas de gol. Una de ellas, en situación de mano a mano. El ucraniano escuchó como el respetable coreaba su nombre en lo que parece el principio del debate sobre quién debe ser el guardameta del Real Madrid en lo que Thibaut Courtois se recupera de su grave lesión del ligamento cruzado. El ex del Shakhtar sigue aprovechando la lesión de Kepa para reivindicarse.

🌪️ Rodrygo y Vinícius desataron la tormenta

Con este escenario de partido, el plan del Real Madrid fue coherente con el once que tenía sobre el terreno de juego: ceder la iniciativa, resguardarse en un bloque más junto y aprovechar las concesiones del Valencia y los metros para que Rodrygo y Vinícius pudiesen galopar a su antojo desde la doble punta. Eso fue lo que acabó a la salida de vestuarios con las esperanzas de puntuar para un cuadro che que se llevó un excesivo castigo para lo que se vio en la capital, pero que pudo ser, incluso, mayor de no ser por las intervenciones de Mamardashvili.

El cancerbero georgiano, con molestias que pusieron en duda su continuidad, fue héroe y villano. Giorgi encajó entre el minuto 42 y el 50 tres tantos fruto de la conexión entre los brasileños y falló de forma grosera en un error en salida de balón que propició el 4-0. Vinícius perdonó un par, pero a insistente no le empata nadie. Y, con la fantasía y visión de juego de Rodrygo, por dentro o desde la banda derecha, tuvo al socio perfecto para resolver el partido.

El trámite terminó con el premio de consolación para Hugo Duro, que pudo desquitarse de las ocasiones que no materializó en el primer acto, al anotar el 5-1 definitivo en los minutos finales, para maquillar la manita. Su tocayo, Hugo González, fue el asistente en su quinto partido como profesional. Así se corta la racha de cinco encuentros sin conocer la derrota para el Valencia, que se marchará al parón en media tabla, mientras que el Real Madrid lo hará segundo, a dos puntos de un Girona que abrió la jornada sabatina en Vallecas con su enésima remontada del curso.

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