El sorteo de cara a la Eurocopa no fue nada benévolo para ‘La Roja’, encuadrada junto a Albania, Croacia e Italia, rivales a los que conoce bien. Comenzó con un adversario asequible para ser del bombo 2, pero se fue encrudeciendo a medida que salieron las bolas y le arrebató el cartel de grupo de la muerte al que comparten Francia, Austria, Países Bajos y una de las selecciones repescadas. En caso de pasar a la siguiente ronda, España se mediría a una de las mejores terceras, recordando que acceden 16 de las 24 finalistas (cuatro terceras avanzan) a los octavos de final.
🇦🇱 ¿Es Albania la cenicienta del gran grupo de la Eurocopa?
La lógica, viendo las plantillas de cada selección, invita a pensar que sí, aunque su clasificatorio fue bastante más cómodo que el de Italia y Croacia. Estaba en el segundo bombo por méritos propios, al terminar como líder de un grupo en el que tuvo a República Checa, Polonia, Moldavia e Islas Feroe como oponentes. Logró el billete a Alemania con bastante holgura, a pesar de que históricamente solo había disputado una fase final (2016) del máximo torneo continental de selecciones y ninguna de un Mundial.
Sylvinho ‘cuela’ a una Albania con «toque español» en la Eurocopa
Elseid Hysaj (Lazio), Thomas Strakosha (Brentford, ex de la Lazio), Berat Djimsiti (Atalanta), Marash Kumbulla (Roma), Kristjan Asllani (Inter) o Nedim Bajrami (Sassuolo) destacan como representantes de la Serie A en la selección de Albania. Es claramente el país al que más jugadores exportan. También hay influencia de la liga española con los nombres de Ivan Balliu (Rayo Vallecano), Keidi Bare (Espanyol) y Myrto Uzuni (Granada). Armando Broja (Chelsea), otro de sus nombres más peligrosos, el jugador llamado a ser el máximo anotador de un combinado que no marca muchos goles, pero que se maneja bien con resultados cortos desde que llegase otro ilustre como Silvinho al banquillo.
🇭🇷 Una Croacia de veteranos competitivos
Los dirigidos desde 2017 por Zlatko Dalić se complicaron mucho la vida para estar en la fase final por sus derrotas ante Turquía y Gales, rivales directos contra los que ha sufrido la selección que todavía capitanea Luka Modrić, quien jugará su quinta Eurocopa. Algo que solo ha logrado Cristiano Ronaldo y que podría emular también Pepe en esta edición. La leyenda del Real Madrid se mantiene como el metrónomo de Croacia, todos le buscan y el seleccionador le entrega las llaves. Juega prácticamente todos los minutos, con esfuerzos menos explosivos, pero con un radio de acción amplísimo. Aunque no esté al nivel superlativo de Catar, manda en las tres alturas del centro del campo, ya sin Ivan Rakitić como socio.
Una selección de ritmo lento, en la que hay otros jugadores con gran visión de juego como Marcelo Brozović, Lovro Majer o Mateo Kovačić para combinar por dentro, aunque algo escasa de desborde por fuera, sin extremos puros más a allá de un Luka Ivanušec que no apunta a titular. Ivan Perišić no está descartado para la Eurocopa, aunque llegaría muy justo y sin ritmo tras su grave lesión de rodilla. Tiene una gran amenaza en situaciones de centro lateral, eso sí, con Borna Sosa y Josip Juranović como laterales centradores y Ante Budimir o Bruno Petković en la punta de ataque, dos nueves corpulentos que se diputan un puesto en el once. Con Dominik Livaković asentado en portería y Joško Gvardiol como líder de una defensa que no es especialmente sólida, aunque acostumbra a crecerse en grandes citas.
Del accidente de Croacia a la crisis de Italia: ¿qué países se perderán la Eurocopa?
🇮🇹 La Italia que menos intimida del siglo
Por mucho que sea la vigente campeona de Europa, Italia vive una inestabilidad interna que lastra mucho su rendimiento. También influye la crisis de talento en una plantilla que apenas cuenta con figuras, más allá de Federico Dimarco, entre los laterales izquierdos más destacados del mundo, un Federico Chiesa que poco a poco está recuperando su nivel como extremo tras su grave lesión en el ligamento cruzado anterior, o Sandro Tonalli, sancionado por el caso de las apuestas hasta después de la Eurocopa.
Por ahora, Marco Verratti (Al-Arabi) es uno de los descartes de Luciano Spalletti, el seleccionador que llegó a mitad del ciclo para suplir a un Roberto Mancini que se marchó a entrenar a la selección de Arabia Saudí. Con dudas sobre cuál debe ser su ‘9’, demarcación en la que Ciro Immobile también parece haber perdido su sitio en favor de Scamacca o Raspadori. Bonucci o Chiellini, otros dos veteranos que ya están fuera de la dinámica de una Azzurra que coincidirá por cuarta vez consecutiva con España en una Eurocopa. En 2008 y 2012, con victorias para ‘La Roja’; y en 2016 y 2021, con triunfos de Italia.
