El mundo del deporte está medido por los resultados. Si ganas, eres bueno; si pierdes, no estás haciendo las cosas como deberías. Aunque haya miles de probabilidades y de variables dentro de un resultado o de un rendimiento, casi todo acaba girando alrededor del triunfo o la derrota. Y esa responsabilidad suele recaer en los hombros de los entrenadores. En este sentido, los cambios que ha habido esta temporada en los banquillos en las cinco grandes ligas de Europa han alcanzado cifras récord.
No cabe duda de que la presión por ganar es mayor que nunca. En momentos de crisis, hay veces que se antepone la supervivencia a la construcción de un proyecto a largo plazo. Esta campaña se han contabilizado hasta 170 entrenadores contratados en las principales ligas europeas; incluidos los interinos. Es decir, los clubes han trabajado de media con 1,73 técnicos durante la temporada, un 26 % más que el año pasado. Cifras que denotan el cambio de tendencia que se está produciendo en el fútbol.
🛠️ ¿Cómo es el funcionamiento de cada liga?
Observando el número de entrenadores que han sido involucrados en los 98 equipos de las competiciones, se puede apreciar un descenso en el número de técnicos debido a los efectos de la pandemia del covid-19. Pese a esto, esta campaña, la primera ‘normal’ tras las medidas impuestas por el episodio vírico, la cifra ha vuelto a aumentar y es un 15,64 % más alta que hace cinco años.
Si nos paramos en contabilizar los datos por ligas, en las últimas cinco campañas, la Serie A y la Bundesliga han contratado a 96 entrenadores en total, la liga española, 93, y la Premier League, 89. La competición que ha mantenido más caras en el banco ha sido la Ligue 1, donde se han cambiado ‘solo’ 81 técnicos.
Esta temporada, la Premier League ha establecido un nuevo récord de directores contratados, con un total de 42. Aunque, una cuarta parta de ellos han sido posiciones temporales o interinas. Los 33 técnicos permanentes suponen un gran salto con los 27 de la temporada anterior. Además, 11 clubes han cambiado de entrenador durante la presente temporada, cuatro más que en cualquiera de las cinco últimas campañas.
Cómo la Premier League se ha convertido en una picadora de entrenadores
Otro fenómeno es cambiar de entrenador más de una vez durante la misma temporada. Ese ha sido el caso este curso del Chelsea, que ha tenido tres preparadores principales esta campaña: Thomas Tuchel, Graham Potter y Frank Lampard. Y entre medias pasó el español Bruno Saltor como interino para un encuentro. Otro caso de cambios frecuentes ha sido el Elche. Hasta seis entrenadores, entre principales e interinos, han transitado por la entidad ilicitana. Sin embargo, nada ha cambiado la inercia de resultados, ya que el Elche tiene asegurada la última posición de la clasificación.
🙃 Cambios en los banquillos para revertir dinámicas
En la mayoría de los casos, los movimientos en los banquillos suceden para cambiar dinámicas negativas. Es el caso del Sevilla, por donde han pasado Julen Lopetegui, Jorge Sampaoli y José Luis Mendilibar, o del Leeds, que ha tenido a Jesse Marsch, Michael Skubala, Javi Gracia y Sam Allardyce. Pero también se pueden producir modificaciones cuando se piensa que el equipo podría dar mejores resultados que los cosechados.
La destitución de Julian Nagelsmann por parte del Bayern München también es un claro ejemplo del alto nivel de presión en las directivas de los clubes. A pesar de luchar por la Bundesliga, la Champions League y la DFB-Pokal, el alemán fue rescindido en marzo. Sin embargo, el cambio por Thomas Tuchel no ha obtenido el fin deseado. El conjunto bávaro quedó eliminado de la Copa de Europa, de la Copa Nacional y es segundo en liga.
Como se atisba en el gráfico, algunos cambios han sido beneficiosos, mientras que otros no han dado el resultado esperado. Uno de los más rentables ha sido la llegada de Xabi Alonso al Bayer Leverkusen, con un ascenso de 11 puestos en la tabla y una semifinal de la Europa League, mientras que la salida de Tuchel del Chelsea por Graham Potter fue una mala decisión para los londinenses, que cayeron cinco posiciones en la clasificación. Unai Emery y su gran impacto con el Aston Villa es también un desenlace positivo tras un cambio en el banquillo.
Tampoco hay que olvidar las implicaciones financieras de un despido; más si el técnico tenía un contrato de larga duración. Se calcula que José Mourinho ha recibido más de 100 millones de euros en su carrera, solamente por cobrar tras su despido.
😜 ¿Qué entrenadores son más longevos en su puesto en Europa?
El caso contrario al que estamos hablando es la confianza en un proyecto y una filosofía. Es algo que no suele suceder. En las últimas cinco temporadas, solo nueve clubes de las grandes ligas europeas han mantenido a su entrenador. Diego Pablo Simeone es el técnico que más tiempo lleva en el cargo en el Atlético de Madrid (4.168 días). Al igual que el argentino, Christian Streich dirige al Friburgo desde 2011 (4.159), seguido de Olivier Pantaloni, del Ajaccio (3.119).
En Inglaterra, Jürgen Klopp lleva en el Liverpool suma 2.783 días, mientras que Pep Guardiola acumula en el Manchester City 2.516 días. En España, Jagoba Arrasate es el pilar de Osasuna y la confianza del club es máxima en él. Lleva 1.786 días en el cargo.
En el otro extremo, están las entidades que han utilizado a varios entrenadores en los últimos cinco años. El Schalke 04 alemán alcanza los 11, más de dos por año de media, mientras que clubes españoles como Elche (10), Valencia (9) y Espanyol (9) también están en la lista. Curiosamente, son equipos que están en la lucha por evitar el descenso esta temporada.
En general, se ha llegado a un punto que el pulso por no descender se está apoderando de los beneficios que puede dar mantener un proyecto a largo plazo. Además, hay que tener en cuenta todo lo que supone cambiar la persona que idea el estilo de juego de un equipo. A veces, las prisas son tan altas que no se evalúa correctamente cuál es el sustituto ideal y los costes que puede comportar. En cualquier caso, la tendencia de cambiar de entrenador está cada vez más asentada. La profesión de entrenador cada vez comporta más peligros para el gremio.